Infierno Blanco

avatar
(Edited)

Un saludo a todos, el siguiente relato fue inspirado por el arte digital de @xpilar, los invito a que visiten su blog. La imagen que motivó este relato es la siguiente.



Fuente

Infierno Blanco

Rhonald se aproximó lo más que pudo al calefactor, sus adormecidas manos estaban prácticamente pegadas de la rejilla del aparato, la batería casi se había agotado; cuando esto sucediera, sólo su traje térmico lo protegería de las heladas temperaturas del casquete polar de Tetis.

Una extensa capa de hielo cubría el polo norte del planeta, por la inclinación del eje de rotación, esta parte del globo, no recibía luz de la fría enana roja, durante todo el año, por lo que el océano estaba congelado hasta varias decenas de metros de profundidad.

Rhonald, piloto de una pequeña nave de exploración, había caído sobre la capa de hielo polar de Tetis, durante una misión de reconocimiento y monitoreo de los sistemas de terraformación, que se encontraban por aquel entonces adecuando el planeta para su habitabilidad.

Completamente solo, a cinco años luz de la estación de emergencia más próxima, ahora dependía de que los sistemas de terraformación pudieran detectar su última transmisión de emergencia y la IA, actuara, enviando un paquete de información a la estación, para que enviaran una misión de rescate.

Ya habían pasado diez días de su accidentado descenso, su nave se despedazó durante el impacto, quedando sus restos dispersos a lo largo de dos kilómetros sobre la blanca capa de hielo. Para su fortuna, pudo rescatar los paquetes de suministros que llevaba para la misión y el calefactor de emergencia, sin embargo, después de diez días, las baterías del calefactor estaban casi agotadas y los alimentos se habían terminado.

Por segunda vez, golpeo la rejilla del aparato, esperando inútilmente que eso lo hiciera emitir más calor. Sus dedos, adormecidos y amoratados por el frio, empezaban a sentirse más como pedazos de carne muerta, que como parte de sus manos. No se había retirado las botas desde que llegó a aquel infierno congelado, pero sentía que, en sus pies, sucedía algo similar a lo que podía ver en sus manos.

El traje térmico parecía ya no estar funcionando, al parecer, los escasos fotones que llegaban a aquel lugar, no eran suficientes como para recargar sus baterías, así que su sistema de climatización dinámico había dejado de funcionar, y sólo lo protegían las capas de tejido aislante que lo formaban y que eran insuficientes para mantenerlo caliente por sí solas.

Ahora, sin ninguna fuente de calor y aparentemente sin esperanza de recibir ayuda, sentía que todo había llegado a su final, sin más que hacer, temblando violentamente y con todos sus músculos contraídos, se puso de pie y empezó a caminar de un lado a otro sin rumbo, simplemente intentando inútilmente calentar su cuerpo. Una gran sensación de cansancio y somnolencia lo agobiaban, pero sabia que no podía dejarse vencer por el sueño, no sin antes encontrar como calentarse.

Caminó a lo largo de la línea del impacto, esperando encontrar algo que lo ayudará, al llegar al principio, sitio donde la nave golpeó el hielo por primara vez, pudo encontrar uno de los pequeños cohetes de combustible químico, que aun eran usados para disminuir la velocidad de las cápsulas de escape al llegar a tierra, de alguna extraña manera había ido a tener ahí.

Se recostó de un fragmento grande del fuselaje que había quedado en el lugar y se empezó a quitar el traje térmico, por alguna razón que desconocía, sentía que le empezaba a quemar el cuerpo y le pareció que también sería un buen objeto para quemar con el combustible del cohete.

Vestido ahora sólo con la delgada ropa interior, colocó el mameluco térmico sobre el hielo y con su navaja agujereo el tanque de combustible del cohete, derramando el gel combustible, que aun a tan bajas temperatura, permanecía fluido, luego, con la batería de su inútil comunicador el cual había retirado del mameluco, antes de dejarlo en el piso, y un par de cables que arrancó con dificultad de los circuitos del cohete, logró, a duras penas, debido a sus endurecidos dedos, encender la tela impregnada en combustible.


―Lo encontramos, señor, pero su cuerpo estaba completamente carbonizado ―dijo el cadete, señalando en dirección a un gran trozo de fuselaje de la nave siniestrada.

―¿Cómo pasó? ―pregunto el líder de la misión de rescate.

―Es difícil de decir, aun sus restos están humeantes ―dijo el joven haciendo un gesto de desagrado ―. Al parecer trató de encender fuego con combustible de un booster, y lo derramó sobre él, al encenderlo se incendió a si mismo. Encontramos el tanque del cohete perforado. Tal parece que ocurrió hace pocas horas.

Texto de @amart29 y arte digital de @xpilar, diciembre de 2019

Otros relatos de la serie La Era de Perseo

I can only thank @xpilar for allowing me to use his digital art in my publication and for motivating my creation. Thank you very much @xpilar

Thank you all for visiting my publication, I hope your comments and I appreciate your support, until next time



Posted from my blog with SteemPress : https://materia-oscura.000webhostapp.com/2019/12/infierno-blanco


0
0
0.000
11 comments
avatar

Excelente como todas tus historias, mantienes la atención del lector de principio a fin, @amart29. Gracias por compartir tu talento. Apoyado en el #toptres de hoy.

0
0
0.000
avatar

Jojo. morir quemado debe ser una completa tortura. :o

0
0
0.000
avatar

Todos tus relatos son muy buenos, te auguro exitos en el futuro, espero que pases una linda navidad junto a tu hermosa familia mi amigo amart

0
0
0.000