Hoy es jueves, «el cuerpo lo sabe», el día del TBT. Mi amigo José Becerra, a quien cariñosamente llamamos «Galileo», pese al paso del tiempo, no olvida los sucesos ocurridos el 30 de julio de 2007, cuando dos trenes colisionaron en la Estación del Metro Plaza Sucre-Catia, Caracas-Venezuela, «él operaba uno de ellos». Les pongo en contexto.

La noche del día sábado 28/07/07, mi amigo Galileo (en la foto, franela azul, rodillas en el piso), nos encontrábamos de Retiro en un lugar que se llama «Pozo de Rosas». Lugar donde se hacían encuentros de Formación-Crecimiento personal auspiciados por el Centro al Servicio de la Acción Popular (CESAP).

Como pueden apreciar, las dinámicas rompehielos que nunca pasarán de moda. Esa noche, José me comentó que posiblemente no irá a trabajar el lunes. Él, como operario de trenes de la Compañía Metro de Caracas C.A., gozaba de sus vacaciones y el lunes 30/07 le correspondía reintegrarse a las 05:00 am. Pero no se encontraba muy animado y pensaba retirarse por mejores ofertas laborales (viaje a Panamá).

Pues, el día lunes 30/07, en su segundo recorrido, dirección Pro-Patria ⇾ Palo Verde, Galileo operaba el tren que le llegó por detrás al que estaba aún en el andén de la Estación Plaza Sucre. Sobre lo sucedido no puedo profundizar porque hasta los mismos bomberos fueron silenciados. Tuve la oportunidad de ver las imágenes en el celular de un amigo que para entonces era bombero y la que les dejo seguidamente no muestra la gravedad del suceso.

Mamá, que caminaba por el Bulevar, nos contó que sintió «como si el piso se levantara (terremoto)» y la gente empezó a salir de la estación por las diferentes entradas.

Mi amigo, José Becerra, permaneció en el Hospital por tres meses. Sufrió algunas fracturas, contusiones con objetos cortantes, pérdida temporal de la memoria. Al día de hoy, se encuentra bien con su familia. La Gerencia de Recursos Humanos del Metro de Caracas le jubiló con salario completo.

Las causas del accidente, según conclusiones que solo aparecieron en prensa, se debió «a un problema en el software». No comentan que los sistemas de seguridad no alertaron, las señalizaciones no funcionaron y el Centro Control de Operaciones (CCO) no visualizó nada anormal. El CCO, es como la Torre de comunicaciones en un aeropuerto, en donde se ve en tiempo real la ubicación de las distintas naves aéreas para evitar la colisión entre ellas.

Las cosas cuando van a pasar pasan. Algunas amistades pensaron en su momento de que Galileo había presagiado el accidente, yo jamás compartir esa idea, él tampoco. Lo que, si es cierto, no tuvo que renunciar; ese fue el último día en El Metro de Caracas, tal cual el pensamiento de José Becerra dos noches antes del accidente.

Si quieres participar, me parece que aún estás a tiempo, tienes hasta las 11:59 pm de HOY JUEVES, así que apúrate y recuerda cumplir las reglas.

Concurso de TBT - Un día de esos.

A ver si se animan, el amigo @castri-ja, @faniaviera y @silher…