Si una vez cuando era niña mi madre y yo nos fuimos de viaje con mi tía y su esposo, el viaje se tratada de ir a visitar al tío del esposo de mi tía el camino era un poco complicado ya que ellos vivían en la montaña y para llegar a ellos había que pasar por un camino muy rocoso.

Al principio todo estaba bien pero en el momento que empezamos a subir la montaña hubo una de las personas que vivía en el lugar le dijo al esposo de mi tía que no subiera ya que el carro en el que andábamos no estaba acondicionado para el tipo de terreno que era para subir la montaña. La verdad todos hicimos caso omiso a esa advertencia lo cual más adelante en el viaje pagaríamos un terrible precio.

A mitad de camino conseguimos aun señor mayor y le damos la cola, así que todos íbamos conversando cuando en un momento el carro expulsara una pieza y eso causa que se quede sin frenos en un momento de maniobra el esposo de mi tía decide que la mejor forma de detener el carro era estrellarlo contra la montaña ya que en ese momento estaba imparable y se acercaba hacia despeñadero.

Al chocar el auto contra la montaña este se voltea y la peor parte la recibe mi tía ya que el auto cae encima de ella, nosotros logramos salir ileso pero mi tía seguía de bajo del auto, así que unas personas que estaban cerca ayudaron entre todos a sacar a mi tía. A pesar de lo brusco del accidente mi tía logra salir solo con unos golpes y luego de estar recluida en el hospital sale solo con golpes y aruños.

Ya de ese accidente han pasado más de 15 años pero hasta hora yo todavía no he podido volver a subir esa montaña ya que sigo temiendole o mejor dicho le tengo respeto.