La Game Boy Advance (conocida en Japón como ゲームボーイアドバンス; Gēmu Bōi Adobansu), abreviada como GBA, es una popular consola de videojuegos de la compañía Nintendo, fabricada desde marzo de 2001 hasta 2008.
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Dicen que Recordar es vivir, y a mí me encanta recordar, sobre todo cuando se trata de mi hijo Gabriel. Ya Gabriel tiene 20 años, y viajar a aquellos tiempos en que siendo pequeño, le compraba juegos y todo lo que pudiera hacerlo feliz y divertirse en sus momentos libres, me hace feliz a mí también.

Cuando mi príncipe tenía alrededor de 5 años de edad, comenzó la fiebre por comprarle videojuegos pues, aún siendo tan pequeño, ya manifestaba atención por estos. Para ese tiempo, ya había salido al mercado el precioso Game Boy Advance, revolucionando al mundo de los videojuegos y haciendo que Gabriel se apegara y afiebrara con este nuevo juguete.

Recuerdo que le compraba muchos juegos que venían en unas pequeñas cintas o casettes que se insertaban en el aparatito y hacia que uno disfrutara el juego en cuestión. A Gabriel le encantaba y recuerdo que le compré algunos juegos para comenzar, entre ellos los de Super Mario (un clásico desde siempre), La Leyenda de Zelda (fabuloso juego), Kirby (genial), Metroid, el infaltable Pokemon, Megaman, Crash Bandicoot, Sonic y algunos más que en este instante no alcanzo a recordar.

Ya Game Boy Advance cumplió 20 años de creado. Me enteré repasando las noticias antes de inspirarme a realizar esta publicación. Cuando salió al mercado fue la sensación y venía en un modelo diferente al que yo le compré a Gabriel. Era un diseño más rudimentario el que se estrenó, pero era la sensación al fin.

Luego salió al ruedo el Game Boy Advance SP, un modelo más estilizado y elegante, mejor presentado y con una mejor iluminación. Este diseño fue el que le compré a Gabriel y era su tesoro preciado, a tal punto que nunca me lo quería prestar jajaja. Pues sí, sepan que a mí también me encantaba jugar en el aparatito, y Gabriel nunca me lo quería prestar. A los adultos por lo general, nos encanta sumergirnos en ese mundo hermoso de fantasía, que desarrolla nuestras destrezas y habilidades cognitivas, creando un aura de desestrès y satisfacción. Ese efecto es propio de los videojuegos.

Sin embargo, tanto en adultos y sobre todo en los niños, hay que tener una buena supervisión a fin de que no se creen adicciones pues, los extremos, también son malos y, debemos manejarnos en el equilibrio, así se lleva una buena vida. Era así como en las noches, después que Gabo se quedaba dormido, su mami (o sea, yo) corría a buscar el Game Boy y se quedaba jugando largos ratos, inclusive llegando a trasnocharme. Momentos de alegría que me encanta recordar y me hacen estar consciente de cuán rápido pasa el tiempo.

Debo comunicarles que para nada soy una Gamer profesional ni dedicada. Los juegos que practico en los momentos libres, por lo general son juegos de tipo Fresita, así los llamo yo. Se trata de juegos sencillos, de alegres colores, que me produzcan una sensación de tranquilidad más que de estrés y angustia por no poder alcanzar un premio o algo parecido.

Entre esos juegos del Game Boy Advance de Gabriel, les muestro los que más me gustaba jugar a escondidas pero con total satisfacción. Ellos son

Todos los SUPER MARIO, en especial, el de Mario y Luigi. Estos hermanos en sus aventuras, siempre tienen algo que ofrecer en una travesía fabulosa, llena de colorido y excelente música. Un clásico de los videojuegos que me encantaba en el Game Boy Advance.

METROID, este juego me encantaba porque era así como de aventuras espaciales donde un bueno se enfrentaba con una réplica mala de sí mismo. El entorno era muy ambientado a todo lo espacial y las luchas también me gustaban a pesar de no ser mi género favorito de juegos, porque en realidad todo el ambiente del juego, estaba muy bien diseñado y me llamaba la atención.

KIRBY, este simpático muñequito color rosa, también era uno de mis favoritos. Me gustaba lo tierno de su apariencia y lo versátil a la hora de defenderse y avanzar en el juego. Realmente uno de los más lindos y que más eran de mi agrado y preferencia.

Como estos, mis favoritos, Gabriel tenía los suyos y eran muchos más. La tecnología en ese tiempo era maravillosa, como lo sigue siendo hoy día. Los videojuegos siguieron avanzando y sacando ediciones mejoradas de cada aparato. Es un mundo fascinante en el que aún no me involucro del todo pero si me encanta ver a quienes le dedican mucho de su tiempo a ello.

Recordar es vivir. Hoy lo hice, trasladándome a los tiempos del Game Boy Advance para rendirle homenaje en sus 20 años de existencia (la edad de mi príncipe Gabriel).