El fin de semana pasado descubrí este manga de Shirou Tozaki y Satomi Kei en una página de tantas en donde se publican estos cómics. Leyendo la sinopsis, uno pensaría que estaría hablando de una especie de agente secreto internacional tipo James Bond. Lo que encontré en su lugar fue a un personaje llamado simplemente "Zero".

Zero se dedica a hacer "originales", o réplicas tan perfectas que ni los curadores ni los valuadores de los museos han logrado discernir cuál es la obra original y cuál es la réplica. Sobre su pasado, en uno de los primeros cinco volúmenes (de 7 publicados en formato manga, 78 publicados en la revista Super Jump), descubrimos que era hijo de un artesano, quien se suicidó debido a que su reputación había sido manchada tras ser víctima de un fraude. Tiene un amplio dominio de la arqueología y el arte, por lo que podemos deducir que el hombre ha estudiado una de estas profesiones. Además, la policía y las autoridades de los principales museos del mundo han buscado varias formas de encerrarlo tras las rejas... Aunque recurren a él artistas, millonarios y hasta familias de limitados recursos, quienes la mayoría de las veces acceden a sus demandas.

Así mismo, su tarifa depende mucho no solo del cliente, sino del comportamiento y actitud que dicho cliente tenga hacia la vida y hacia la gente; así como pide como tarifa las Islas Fiji a un padre desesperado por llevar a la justicia al asesino de su hijo y les permitió a los aborígenes administrarlas, en el capítulo tres "La máscara de la muerte de Pulotu", puede pedir hasta solo un dólar a un rico mercader de origen español que maltrata a la gente en el capítulo dos "El diamante maldito de Yuma".

Un aspecto interesante y loable de esta obra es el tiempo dedicado por los autores para investigar cada artefacto representado en los capítulos, logrando de ese modo reflejar cierto realismo en lo tocante al mundo del arte y la ciencia. Lo podemos notar en los apuntes al final de cada capítulo, en donde explicaban con brevedad cada obra artística.

Estas cualidades hacen de este manga una distracción perfecta para un fin de semana o para antes de dormir. Y si eres un lector curioso, te animas a averiguar más sobre estos artefactos.