En una pequeña población hacia vida una familia muy numerosa, en una enorme casa, en ese lugar una pareja vio crecer a sus hijos y convertirse en grandes profesionales, aquella pareja tuvo la satisfacción de tener un matrimonio solido, uno de ellos enfermo y murió y al cabo de un mes el otro también falleció, estaban destinado que solo los separara la muerte.

Aquella casa fue objeto de grandes peleas entre sus hijos, la paz había desaparecido, sin embargo esta controversia no duraría mucho, cada uno de ellos pudo adquirir sus bienes inmuebles poco a poco, solo una hermana de aquel grupo de hijos, se quedo en esa casa, ella expresaba con mucha fuerza que solo muerta la sacarían de ahí, ya que era el único recuerdo que quedaba de sus padres.

Paso el tiempo y todo iba aparentemente bien, hasta que la hermana que decidió quedarse en la casa que era de sus padres, recibió una mala noticia, uno de sus hijo había caído en problemas económicos graves por una mala decisión, a raíz de ésto, la señora sufrió un ACV, después de ese accidente no tuvo mejoría y murió.

Tantos los hijos de la difunta, como sus hermanos no quisieron saber nada de esa casa, la cerraron después de aquella tragedia familiar y la casa al pasar el tiempo se iba deteriorando y cayéndose a pedazos, debido a que nadie quería conservarla y de aquel grupo de hijo, el que se motivaba a reconstruirla o hacerle algún arreglo, le pasaba algo que impedía mejorar el inmueble, decidieron venderla.

Mientras esperaban la firma del documento de compra-venta de la casa, uno de aquellos hermanos, dijo:

La verdad es la mejor decisión que tomamos, así con este dinero nos podemos ayudar entre todos y apoyar a nuestro sobrino de su mala situación económica.

Vivimos momentos muy agradables en esa casa como familia y jamás se me olvidara que de niño un día vi hasta un fantasma, una casa muy especial.

Otro de sus hermanos, respondió:

Si inventas hermano, deja de decir esas cosas, los nuevos dueños se asustaran y no querrán comprarla.

El notario, realizo el llamado para la firma del documento y ésta se logro vender, la casa se mantuvo cerrada después de su venta y no le hacían arreglo alguno, vino una gran lluvia donde su antigua edificación cedió y se vino abajo por completo, el nuevo dueño observando lo acontecido con la casa, decidió construir y contrato a algunos trabajadores para iniciar la construcción de una nueva propiedad.

Los obreros iniciaron los trabajos para comenzar a construir una nueva y moderna casa, pero jamás se esperaron la experiencia que iban a vivir en aquel lugar.

Aquellos obreros, mientras estaban concentrados en su trabajo, sentía que alguien los molestaba, les daban golpes en la espalda y los empujaban, al principio se imaginaban que entre compañeros se estaban haciendo bromas, hasta que un día se sentaron a almorzar y uno de ellos molesto, dijo:

Oye les voy a decir algo, ya dejen el juego de golpear y estar empujado, concentrémonos en terminar la casa rápido como nos dijo el patrón.

Y otro de ellos expresó:

A mi también me han empujado, pensé que eras tu, a ver ¿Quién es el gracioso?

Todos sorprendidos, dijeron:

Pues a nosotros nos paso lo mismo y nosotros no hemos hecho ésto y si ustedes ni nosotros fuimos, y no hay nadie más en este lugar y solo estamos los que estamos, pues ¿quién será?

Todos se vieron las caras y salieron corriendo de ese lugar, dejando hasta sus herramientas abandonadas, llamaron a su patrón y dueño de la casa, avisándoles que ellos no iban a pisar más ese lugar.

Actualmente el lugar sigue igual y la nueva casa no ha podido ser construida.

Espero que les haya gustado mi post, les mando un abrazo.

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