Un animal que no es animal.

Se descubrió un fósil de hace 609 millones de años muy particular, parece un animal pero es demasiado simple como para que pueda ser considerado como tal.

Los animales evolucionaron de antepasados unicelulares para luego diversificarse en unos 40 diseños anatómicos pluricelulares distintos, el cuándo se dio la transición, es algo que por ahora desconocemos, sin embargo, este nuevo organismo llamado Caveasphaera sugiere que los rasgos embriológico que caracterizan a los animales fueron desarrollados mucho antes que los propios animales.

Para llegar a esta conclusión se analizaron varios ejemplares que miden aproximadamente medio milímetro, de los que se habían conservado hasta sus células, con ellos dado que eran de distintas edades se descubrieron las diferentes fases del desarrollo de los individuos en las primeras etapas de su vida empezando por estadios unicelulares hasta llegar a los pluris celulares.

Se ha visto que es un organismo muy simple por lo que no encaja del todo en la definición de animal, pero lo relevante aquí es este proceso de desarrollo, pues incluye acciones celulares, algo muy característico de los embriones de animales, por lo que podríamos estar ante el eslabón perdido de una transición que en realidad tuvo más de una fase.