La Soledad de las Ideas
"O se tienen muchas ideas y pocos amigos o muchos amigos y pocas ideas."
Santiago Ramón y Cajal
No es algo que a mucha gente le guste, pero la gente que es muy inteligente es, de alguna manera y en algunos casos, bastante insoportable. Se puede decir que hay una gran variedad de pensadores y cada uno de ellos sufre de alguna particularidad que lo hacen ser un ser humano distinto de la mayoría.
No es que quieran ser diferentes, es que son diferentes y eso se nota. Así, que cumpliendo el viejo precepto de que "el clavo que sobresale es el que se golpea primero" pues, se presenta un rechazo de la gente por estos humanos tan raros. Por otro lado, cierta variedad de gente con muchas ideas, no suele ser muy sociable o no le hace mucho caso a la necesidad gregaria de su naturaleza humana, así, puede pasar un buen tiempo reflexionando o encerrado en sus experimentos, olvidando interactuar con otras personas o llegando a considerar que las demás personas son simples distracciones u obstáculos para sus labores.
No quiero pensar que todas las personas con muchas ideas sean tan antisociales, después de todo, hay casos de gente que es bastante inteligente en su nivel lógico-matemático y también gozan de una sana inteligencia emocional y de inteligencia social.
Puede que lo que necesitemos no es solo tener muchas ideas, sino coordinar esta productividad de nuestros aspectos lógicos, con el desarrollo de aspectos sociales y emocionales que nos permitan seguir siendo considerados, en alguna medida saludable, parte del entorno social.
Claro, hay que recordar esa frase vieja, que señalaba que "es peligroso estar bien adaptado a una sociedad enferma", pero, partiendo de que toda sociedad tiene cierto toque de locura que se considera normalidad, entonces, puede que nos haga mas bien que mal, adaptarnos o al menos saber como convivir con esas locuras colectivas que llaman normalidad.
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