Viaje desorientado | Sueños de un cerebro perturbado II

Necesitaba ir a un lugar al otro lado de la ciudad y no tenía cómo, dos personas que tenían carro me ofrecieron ayuda, acepté; terminé sentado en el medio de la parte trasera como un niño pequeño porque dos amigos de ellos también iban a ir con nosotros. Durante el camino la conversación fue muy y amena y llegué a conocerlos un poco más, eran totalmente extraños hasta que logré verlos a los ojos y sentí conocerlos desde vidas anteriores.

Uno de ellos al parecer sufrió una parálisis cerebral en el trayecto, porque de un momento a otro no podía usar el lado izquierdo de su cuerpo, igual nadie le dió importancia, ¿por qué la tendría? El otro amigo de ellos nos vómito a todos, fue tan divertido que lo ignoramos y el vómito desapareció.

Al llegar a la universidad tuve la urgencia de descubrir el por qué estaba ahí, no lo recordaba, no recordaba haberlo sabido nunca antes. Todos salimos del carro y un hombre en silla de ruedas intenta robarme, sus acompañantes atemorizaban más que él, pero su existencia tenía más valor que la de los demás, por eso le temí. Me di la vuelta y salté una serie de muros dónde no pudieron seguirme y evité que me robaran, por esa distracción perdí de vista a mis amigos, intenté alcanzarlos pero la universidad fue reconstruida después de un derrumbe y no era igual que antes. Los perdí, encuentré al hermano gemelo de uno de mis amigos, no me enteré de esto hasta que desperté, le expliqué que los estaba buscando y me dijo que me iba a orientar.

Al seguirlo tropiezo con una profesora que resulta ser una de mis profesora de la infancia y el reencuentro atrae la mirada de todos, ella me da un beso en los labios y todos gritan, uno de sus alumnos se pone celoso y nos intenta separar, la profesora lo empuja y él cae, le dice que yo soy el único alumno que ella tuvo y que tendrá al que va a besar, y me vuelve a besar dejándome sin equilibrio haciendo que me caiga también, me despeinó y fijó una sonrisa en mi boca, el alumno celoso sigue furioso en el piso mirándome y en un impulso le guiño el ojo y le digo que debe aprender o nunca va a recibir un beso así de ella. Todos enloquecen y ríen mientras me levanto y me alejo de ahí.

Caminando por un pasillo explorando por mi cuenta me encuentro rodeado de solo mujeres y hacen que me pegue a una pared mientras un desfile toma lugar, muchas amigas están ahí, al reconocerme mientras modelan de acercan a mí y me dan besos para seguir con su camino. Una de ellas me toma de la mano y hace me siente en una de las escaleras entre sus invitados, quedo junto a una de sus amigas que me toma de la mano, se pega a mí y comienza a hablarme en susurros con acento español.

Los temas de conversación fueron sobre mi aislamiento y alejamiento de todos, sobre las miradas que recibía por el trato que muchas de ellas me estaban dando, la sorpresa que tuvo una pareja al enterarse de que mi crisis antes de irme no fue porque estuviera enamorado de una de ellas, se estableció que tendría con hablar con todos para aclarar las cosas, en eso ella se acerca mucho a mi rostro y me dice que olía delicioso, comienza a rosar sus labios contra mí y justo cuando se acerca a los míos y me giro completamente para besarla.