Hablar de Chavín es remontarnos a cientos de años y apreciar a una cultura enigmática, con mucha tradición y sobre todo su veneración. Los antiguos Chimues eran religiosos y grandes arquitectos, todas sus construcciones tenían un significado evocado a sus dioses y la naturaleza que provenía de ellos.

Mucho he mencionado y lo que viene es simplemente increíble, tanto que si no lo hubiera visto, no lo habría creído. Dentro de todo lo maravilloso de esta cultura, se ha destacado a sus divinidades y el uso de alucinógenos para estar cerca de ellos. Tanta era su veneración que todo ésto fue plasmado en una fortaleza, que en lo alto de todo el contorno, tenía incrustaciones de formaciones de cabezas hecha de piedra. Todas éstas tenían diversas formas y características muy propias, se les conoce como Cabezas Clavas.

Cabezas Clavas

Como se ve en la siguiente descripción, donde se explica que eran esculturas líticas que representaban cabezas humanas con rasgos felinos.

Las cabezas clavas estabas alrededor de la fachada principal y en lo alto, reposaban como símbolo de la transformación del ser humano a felino. Todo ésto, a través del uso de alucinógenos.

Existían muchas cabezas clavas, pero por el paso del tiempo y el clima extremo de Chavín, se fueron desprendiendo de lo alto y cayeron a su descanso eterno fuera del muro. En mi primera visita hace muchos años habían dos aún, pero luego de muchos años, solo ha quedado una.

Después de todas las que han caído, se ha tratado de preservar el lugar y protegerlo para que la única cabeza colocada e lo alto prevalezca por mucho tiempo más.

En esta cabeza podemos observar loas colmillos felinos que salen del rostro y las líneas que representan a los felinos. Las demás cabezas clavas encontradas en el suelo cuando de descubrió, así como las que han ido cayendo, fueron llevadas al Museo Nacional de Chavín.

Museo Nacional de Chavín

En el museo se pueden encontrar todas las cabezas clavas que se han encontrado. Muchas con caras muy extrañas y pero todas con esa característica felina.

Algunas de las cabezas tienen partes cortadas o desprendidas, ya que cuando no se conocía lo que realmente significaban, no se resguardaron apropiadamente. Hoy en día hay medidas de seguridad muy serias y una de ellas, es que no se deben tocar y al tomárseles las fotos, deben ser sin flash.

Algunas de ellas tienen los orificios de la nariz muy grandes y ésto era porque algunos alucinógenos de inhalaban y esto producía que las fosas nasales se ampliaran. En la siguiente foto se puede apreciar y lo que persiste es las facciones felinas. En todas las cabezas se observa el brazo de roca, que era la que era incrustada en el muro. Ésta no se ha desprendido de ninguna en tantos años.