El renacimiento de la emperatriz maliciosa del linaje militar 231.7
231.7 El regreso de un viejo amigo
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Traducción propia, principalmente de fuentes en inglés, pero comparando con la fuente en chino para mayor fidelidad.
La emperatriz Xian De estaba caminando en la noche. Mientras soplaba el viento, el vino que había estado bebiendo parecía desbordarse y el mareo que sintió por un corto tiempo desapareció, haciéndole despertar angustiosamente.
Se aferró a la baranda junto al estanque y suspiró con algo de cansancio.
Ella sabía que las palabras que dijo hoy estaban todas en pique. ¿Pero cuánto tiempo podría vivir el emperador Yong Le? También tenía mucho miedo y quería evitar ese final, no quería ver ni escuchar, bloqueando sus oídos, pero cada vez que el emperador Yong Le tomaba la iniciativa de mencionarlo para hacer que se enfrentara a las cosas que no quería enfrentar.
No solo había tres pulgadas de tierra en el suelo, mucho menos en una persona.
Tao GuGu dijo: “Su señoría, afuera hace frío. Es mejor volver".
La emperatriz Xian De sacudió la cabeza. Había una cadena de cuentas budistas en su muñeca y fue solicitada por el emperador Yong Le del templo. Todos los días cantaba escrituras budistas, rezando a los cielos para que se apiaden del mundo y dejen que ocurran milagros.
Todos las cuentas budistas se suavizaron hasta que brillaba, era obvio que la emperatriz Xian De lo había estado usando durante muchos años. Miró a la luna en los cielos. La luna era muy redonda y esta guerra casi llegaría a un año no mucho después. Después de un año de lunas llenas y nuevas, este fue un buen resultado. Al ver que los resultados estaban cerca, fue ella la que no pudo controlarse e hizo movimientos precipitados.
Estaba un poco asqueada de sí misma en su corazón. Después de darse la vuelta, quería caminar hacia adelante, pero escuchó el sonido de un golpeteo. Al bajar la cabeza, no sabía cuándo se rompió la cadena de cuentas budistas y todo cayó al suelo, haciendo sonidos tan nítidos.
Estaba perfectamente bien, entonces, ¿cómo podrían romperse las cuentas budistas?
"Tao GuGu..." murmuró la emperatriz Xian De y una sensación de inquietud apareció en su corazón. Era como si un corazón se hubiera apretado y en un instante no pudiera respirar.
"¡Su señoría!" Tao GuGu saltó en estado de shock y rápidamente se acercó a apoyarla, pero la emperatriz Xian De agitó las manos y se puso en cuclillas en pánico, "Rápido. Ayúdame rápidamente a recoger...
Tao GuGu se puso en cuclillas cuando vio a Deng GongGong apresurándose con un joven guardia y dijo con expresión sorprendida: “Su señoría, Su Majestad no está bien. ¡Vaya y echa un vistazo!"
La emperatriz Xian De solo había recogido una cuenta cuando la escuchó y su mano titubeó y esa cuenta budista se deslizó hacia el suelo y cayó al estanque. Ni siquiera se escuchó un chapoteo y ya no se vio.
En el Salón Yang Xin, todos los eunucos y las mucamas del palacio estaban arrodillados.
Deng GongGong estaba parado en la esquina con la cabeza gacha con una expresión triste.
Cuando la emperatriz Xian De entró, Gao Zhang salió y sacudió la cabeza cuando la vio.
La emperatriz Xian De tropezó y si no fuera porque Tao GuGu la estaba apoyando, se habría caído.
Después de un rato ella dijo: "Todos ustedes se retiran".
El emperador Yong Le también agitó su mano de la cama.
Todos en la sala se retiraron.
La emperatriz Xian De dio un paso adelante.
Caminaba muy despacio y parecía resistirse a un final en el que no creía. Pero tenía que seguir adelante. Cuando llegó a la cama, se arrodilló a medias mientras miraba a la persona en la cama.
El emperador Yong Le también la miró y, después de un momento, sonrió en su lugar: “Está bien. Al menos antes de partir, uno puede beber el vino de nieve que preparó."
"Xing Chi..." La emperatriz Xian De lo miró con lágrimas.
Le llamó a 'Xing Chi', ese era el pequeño nombre del Emperador Yong Le, no 'Su Majestad'. Cuando aún era una jovencita, a la emperatriz Xiao le gustaba y le dijo el nombre de Xie Chi. A la emperatriz Xian De le gustó el nombre de Xie Chi y sintió que esta persona era muy recta.
A pesar de que en los largos años, él le había causado heridas insoportables, pero la Emperatriz Xian De no tenía forma de ver irse a la otra parte.
¿No estaba la vida destinada a tener tal destino? Este destino no era perfecto y se consideraba un destino condenado, pero cuando estaba a punto de terminar, ella era terca y no estaba dispuesta a dejarlo ir. Era como las polillas atraídas por el fuego y no las soltaban hasta el último momento.
"Qing Zhen, no puedo acompañarte". El emperador Yong Le se disculpó: "Cuando te casaste conmigo, había pensado que estarías protegida, pero de hecho durante tantos años, no ganaste nada". Habló muy lentamente y tuvo que descansar un rato después de una oración, aparentemente muy difícil para él.
La emperatriz Xian De dijo: "No hables más".
Para ambos, cuando se convirtieron en Emperador y Emperatriz, uno se llamó a sí mismo 'Zhen' y el otro se llamó a sí misma 'ChenQie' y solo cuando la vida estaba a punto de llegar a su fin y ya no habría una reunión más, sólo entonces usaron 'tú' y 'yo', como un par en una pareja común.
Él dijo: “Ve y vive tu vida. Eres tan buena que en el futuro serás afortunada. Cásate con otro y no elijas un marido tan egoísta como yo. Encuentra a alguien que te quiera, te adore..."
La emperatriz Xiand De estaba llorando en silencio.
De repente sintió que le agarraban la mano y vio al emperador Yong Le mirándola fijamente. Apretó los dientes y dijo: “Pero no puedo resignarme. No deseo... soy muy egoísta. Tú eres mi mujer. No estoy dispuesto a que sigas a alguien más."
La emperatriz Xian De se sobresaltó.
“Este año había estado trabajando duro para seguir con vida, esperando durar unos días más. No fue por ver a Xie Yuan gobernando todo bajo los cielos. El imperio se ha establecido y no hay nada que no pueda dejar ir. Es solo que yo... No puedo soportar..." Usó su energía para respirar, "No puedo soportar separarme de ti... Ser capaz de ser marido y mujer contigo durante medio día más o incluso un momento más es bueno".
“Al principio, cuando te vi por primera vez y luego fuiste llamado a ingresar al Palacio, en realidad no era la intención de la Madre Imperial. Desde el principio fui yo. Fui yo quien le dijo a la Madre Imperial que sentía que eras buena. Durante tantos años creías que estaba satisfecho con la selección de la 'Emperatriz Xian De', pero no era cierto. Dije que cualquiera podría ser esta Emperatriz mientras se hiciera bien, pero no es cierto. Desde el principio siempre fuiste tú. Esas palabras... fueron para engañarte..."
La emperatriz Xian De se cubrió la boca y dijo: "¿Por qué no lo dijiste antes?"
La cara del emperador Yong Le se volvió más pálida y su voz era casi inaudible. Él dijo: "Es una pena que mi vida no sea buena y haya implicado toda tu vida..." Extendió la mano, aparentemente queriendo enjugar las lágrimas en la cara de la Emperatriz Xian De, pero la acción solo se hizo a mitad de camino. De repente colgó.
Sus ojos estaban cerrados.
La emperatriz Xian De se cubrió la boca y se enterró en la manta para llorar dolorosamente. Lloró con todo su corazón, pero nadie afuera podía escucharlo. Enterró su voz en la ropa de cama gruesa y odió no poder enterrar todo dentro de sí y desde entonces no necesitaba escuchar, ver, culpar o pensar.
El incienso en el horno de cobre se elevó y se extendió en el aire. Solo hubo contención en la habitación y reprimidos gritos cuando la luna por la ventana era tan brillante y gentil, como si fuera tan perfecta que fuera irreal.
Después de un largo rato, la emperatriz Xian De se puso de pie. Suavemente arregló la manta del emperador Yong Le y besó sus labios. Se arregló el cabello frente al espejo y se limpió las lágrimas antes de abrir la puerta lentamente.
Toda la habitación llena de eunucos y mucamas del palacio se arrodillaba afuera cuando Deng GongGong subió y la emperatriz Xian De dijo con calma: "Su Majestad se ha ido".
Deng GongGong quedó atónito antes de caer de rodillas de inmediato. Dejó a un lado su batidor de cola de caballo y cayó al suelo ruidosamente.
Cuando los eunucos y las mucamas del palacio lo vieron, todos se arrodillaron para arrodillarse y sus gritos resonaron por todo el Cielo.
"Su Majestad... Se ha ido..."
Shen Miao miró hacia la emperatriz Xian De. La emperatriz Xian De llevaba un sencillo vestido de luto blanco y su expresión era como siempre gentil y tranquila, como si no hubiera nada que pudiera sacudir su corazón.
Después de un breve caos en la corte, todo se calmó.
El emperador Yong Le había arreglado todo antes de su partida, incluido el paso del Edicto Imperial y también la posible agitación dentro de la corte. A pesar de que había algunas personas que estaban ansiosas por moverse, las personas que el Emperador Yong Le arregló no eran muebles. Además, Xie Jing Xing enviaba con frecuencia buenas noticias y todos sabían que el emperador Yong Le no tenía hijos, por lo que el hecho de que la posición se transmitiría a este único hermano suyo era bien conocido.
No era que no hubiera voces de duda, pero estas voces de duda eventualmente se desvanecerían. Xie Jing Xing había mostrado coraje y con el arreglo completo del emperador Yong Le, la corte imperial era bastante sólida y no había mucho caos. Quizás sabían que una vez que el Príncipe Rui regresara, no solo sería la victoria lo que traería, sino también las tierras del país Ming Qi y Qin. Esta situación caótica se unificaría por completo y la posición del trono no era tan importante como eso.
Sería mejor ser obediente y permanecer en la posición de cada uno y esperar a que este nuevo Emperador regrese al trono y tal vez puedan compartir algo de crédito.
Solo había beneficios e intereses en las cortes. ¿Y qué hay del Palacio Interior?
Cuando las mujeres del Palacio Interior perdieron al Monarca del que dependían, naturalmente también estaban perdidas. Algunas buscaban la muerte, pero había más que cuidaban el resto de sus vidas. Entre los consortes del Palacio Interior del Emperador Yong Le, la mayoría de ellas eran hijas de funcionarios y no había ninguna que él tomara la iniciativa de traer. Además, el Emperador Yong Le tenía naturalmente una personalidad fría y la única a la que anteriormente él favoreció fue Lu Jing, lo hizo. no lujuria por las mujeres y, por lo tanto, no había grilletes o amor y enredos con esas consorte. Después de la muerte del emperador Yong Le, estas mujeres tomaron la iniciativa al solicitar ayuda de sus clanes familiares, con la esperanza de encontrar una mejor salida en la siguiente porción de sus vidas.
La emperatriz Xian De manejó con calma todo, ya sea la nación que llora por entrar en las Tumbas Imperiales. No había ninguna solicitud de enterrar a nadie y el emperador Yong Le ya había dado instrucciones a Deng GongGong sobre los arreglos después de la muerte y todo siguió sus planes.
Shen Miao vino a visitar a la emperatriz Xian De por la noche. Desde que el Emperador Yong Le ingresó a las Tumbas Imperiales, la Emperatriz Xian De estaba particularmente tranquila. Hoy también era el Festival del Medio Otoño, pero estaba escuchando el Qin que se tocaba en el Palacio Wei Yang.
Shen Miao ordenó a la mucama del palacio que estaba tocando el Qin que se fuera y la emperatriz Xian De la vio y parecía cansada mientras sonreía y decía: "Estás aquí".
“El día es más frío. Su señoría tiene que usar más ropa. Si quiere escuchar el Qin, es bueno calentar el pequeño horno, de lo contrario podría resfriarse”. Dijo Shen Miao.
La emperatriz Xian De sonrió sin objetar y señaló el pastel de luna sobre la mesa: “Está hecho por las cocinas imperiales. BenGong quería instruir a la gente para que te lo enviara, pero luego pensó que ya había sido enviado y, por lo tanto, ya no pensó en ello”.
Shen Miao sonrió, "Su señoría también debería comer algo".
La emperatriz Xian De agitó las manos, "BenGong no puede comer".
Se emitió la sucesión del Edicto Imperial y después de que Xie Jing Xing regresara a Long Ye, sería entronizado. En ese momento Shen Miao sería la emperatriz. Hablando de eso, no era apropiado que la emperatriz Xian De usara esta declaración. Sin embargo, ambas lo tuvieron en cuenta.
“En estos días, BenGong seguía pensando en el pasado. BenGong siente que la partida de Su Majestad debería ser un hecho que BenGong sabía desde hace mucho tiempo y que BenGong definitivamente estaría acostumbrada. Sin embargo, a medida que pasaban los días, se sentía aún más desacostumbrada. Sentiría su corazón vacío todo el día, como si le faltara algo. WangFei, cuando Jing Xin se fue, ¿te pasó lo mismo?"
Shen Miao se sobresaltó.
¿Sentir que algo faltaba? Naturalmente lo sintió. No era nada notable cuando estaba frente a sus ojos, pero después de irse realmente, descubrió lo que había perdido. Durante la separación, lo más probable es que uno entienda las diferentes emociones de uno mismo. Pero... Shen Miao inconscientemente se frotó el abdomen. Lo más probable es que debido a que había un pequeño en su abdomen, no sería tan solitario durante estos largos y largos días.
"Lo más probable es que no seas el mismo que BenGong". La emperatriz Xian De no esperó la respuesta de Shen Miao y, en cambio, se dijo a sí misma: “Anteriormente, Su Majestad no sabía qué tipo de persona era y, por lo tanto, investiga todos sus asuntos. Mientras BenGong escuchaba, sabía que usted era una persona que tenía una mente propia. Te enfrentaste a la familia imperial de Ming Qi y protegiste a la familia Shen, así que desde el principio tienes tus propios pensamientos para hacer las cosas. En cuanto a Jing Xin, casarse con él fue algo accidental y, naturalmente, encajó en su lugar. Si no te encontraste con Jing Xin, aún podrás vivir tu vida porque tu objetivo inicial no era ser la esposa de alguien".
"No es lo mismo para BenGong". Miró el rubí en su protector de uñas y dijo: “La familia de BenGong es rica y estable sin ninguna disputa en la corte imperial, por lo que nací sin preocupaciones. Cuando BenGong se encontró con Su Majestad, sintió que lo más importante en la vida era ser su esposa y vivir con él toda la vida". Ella sostuvo su cabeza y habló lentamente, como si se quedara dormida al siguiente momento pero todavía estaba hablando.
"Quizás es porque la primera mitad de la vida de BenGong fue demasiado libre de preocupaciones, por lo que no sabía que ser la esposa de una persona era algo tan difícil".
Shen Miao no habló.
Fue demasiado difícil para la emperatriz Xian De. En estos días ni siquiera hablaba mucho, pero Shen Miao entendió ese tipo de experiencia. Fue porque hablar de eso no cambiaría nada, pero a veces, hablar de eso era bueno. Para la emperatriz Xian De hablar sobre eso, era mejor que esconderlo en su corazón.
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