Recuerdo a mi abuela a quien llamábamos cariñosamente Mamá Carmen, haciendo todos los años un viaje de peregrinación a la ciudad de Isnotú, lugar de nacimiento del Dr. José Gregorio Hernández y con ella iban un grupo de personas con la misma devoción. Esa devoción que surge de manera espontánea, basada en la vida de un hombre especial, un ser humano con cualidades de nobleza, de sensibilidad, de generosidad, de amor a sus semejantes, que con sus conocimientos de medicina ayudaba a las personas y sobre todo a los que más lo necesitaban, los de menos recursos.

Eso es lo que yo entiendo por fé, es creer en lo que no estás viendo, es estar seguro de que las cosas pueden ocurrir, con solo pedirlo con el corazón. Y en este caso pedir por la sanación.

Son muchas los ejemplos de fé del pueblo venezolano y casos de curación a los cuales la medicina científica no le da una explicación.

Desde que estaba pequeña escuchaba hablar del Dr. José Gregorio Hernández y de sus milagros. Un hombre que vivió en aquella Caracas de los techos rojos, donde se conocían las personas, porque no había muchos habitantes, como ahora que es una ciudad cosmopolita. En aquella época de los años 1880, José Gregorio llega siendo adolescente a esta ciudad, proveniente de un pequeño pueblo de la zona rural de Venezuela, el pueblo de Isnotú. Y allí comienza su historia unida a la medicina, a la ciencia, pero también a la ayuda del más necesitado.

Aquellos que lo conocieron en vida pudieron ver ese ser especial, pudieron notar ese algo que lo diferenciaba de los demás médicos y que no se puede explicar. A veces conocemos personas tan amorosas y tan sensibles que decimos que son ángeles en esta tierra. Creo que eso deben haber pensado las personas que lo conocieron. Cuando muere trágicamente en el año 1919, allí comienza su otra historia, la de los milagros.

Personas que lo conocieron en vida y sabían que era un ser especial, es posible que comenzaron a pedirle por la sanación de sus hijos, padres, esposos, hermanos, amigos y allí en esos instantes de fé comienza la veneración al Dr. José Gregorio Hernández., comienzan los milagros

Un milagro es un hecho que no se puede explicar por la ciencia y que por lo tanto escapa de su comprensión. Los milagros ocurren todos los días. Podemos pedirlos con mucha fé, tenemos esa posibilidad, pero a muchas personas les cuesta mucho comprenderlo.

Muchos han sido los milagros atribuidos al Dr. José Gregorio Hernández, todos están relacionados con la sanación. Hay personas que dicen haberlo visto mientras les hablaba, otros dicen que él los opero y los sano. Otros casos han ocurrido por personas que le piden la sanación de sus seres queridos y este milagro se ha manifestado. Todo un pueblo orando y pidiendo milagros a un santo.

De acuerdo a la Iglesia Católica, un santo es aquella persona que llevo una vida ejemplar y que de acuerdo a sus normas ha sido canonizado.

Reconocimiento del milagro