Azúcar una palabra que hemos idealizado, como una necesidad dentro de la alimentación, dándole todo el poder de dominar el organismo.

El azúcar es el principal enemigo del hígado va directo pero a su vez encontramos otros alimentos que se convierten en azúcar dentro de él, allí se duplica, entre las frutas, los carbohidratos que se convierten en glucosa y los dulces que se ingieren, pueden disparar altos niveles de glucosa, convirtiéndose en un exceso que puede llevar a la inflamación y mal funcionamiento de tan importante órgano.

Sabías que hay estudios que comparan el uso del azúcar con el uso de una droga específicamente la cocaína; y que esta puede causar daños a nivel neurológicos y psiquiátricos en la adultez.
Aunque hay otros estudios que no le dan el valor, o no coinciden, teniendo controversias, es mejor ser prudentes con el consumo de este enemigo de la salud llamado el veneno blanco. .

El consumo excesivo de azúcar da lugar a efectos contraproducentes que van más allá de simplemente agregar calorías o provocar caries dentales pues, reiteramos, incrementa el riesgo de padecer: obesidad, diabetes, síndrome metabólico, hipertensión arterial, niveles elevados de colesterol y triglicéridos, resistencia a la insulina, daño a lípidos, proteínas y ADN (lo que acelera el proceso de envejecimiento); asimismo, se ha relacionado con cáncer y deterioro cognitivo.

En uno de los estudios leídos se recomienda establecer el mismo aviso en letras pequeñas que llevan los cigarrillos y otras drogas como el alcohol, en los refrescos, sodas que son uno de los más peligrosos y más consumidos.

No estoy recomendando su no consumo, claro que podemos consumirla, pero con moderación teniendo en cuenta que la mayoría de los productos procesados que consumimos tienen un alto aporte de azúcar en sus ingredientes, es menester estar alertas.

Hay un dato muy interesante con relación a los bebés, ellos siguen los hábitos de los adultos, los adultos son los que van incorporando el azúcar a sus comidas al gusto de ellos, pero si el niño no conoce del azúcar no le hará falta. El hecho de que arruguen su cara no es por el sabor si no por la sensación extraña de lo que se lleven a la boca.
Es más recomendable que consuman alimentos saludables en su versión natural, no incorporar ni sal ni azúcar, ellos están reconociendo sabores, tratar que esa versión natural les guste y se adapten a consumirla así; nos ahorraríamos muchos problemas en el futuro.

Siempre es mejor comer con el cerebro y no con el estómago la moderación es indispensable; los excesos generalmente son inadecuados y traen consecuencias negativas.

Nada más rico y saludable que comer frutas vegetales al natural