Hablemos de sugerencias ¿Por qué es importante escucharlas?

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Los oídos se hicieron para escuchar ¿Todos sabemos eso no? Entonces, ¿Por qué nos hacemos de oídos sordos cuando alguien tiene alguna inquietud sobre nuestra conducta, actitud o comportamiento? Es que a veces no nos gusta que nos digan cómo debemos ser, seguramente porque nuestro ego es tan grande que no tolera las opiniones de otros ni mucho menos las recomendaciones o correcciones que éstos nos hagan. Sin duda, hablamos de un patrón equivocó sobre una perfección que no existe, y jamás existirá, por lo que habrá personas que insistirán en ser “perfectos” y no aceptarán nunca sus errores, afectando, por si fuera poco, a todo el entorno que los rodea.

Una sugerencia surge como una recomendación que solo busca mejorar algún aspecto de un individuo, una industria, un mercado financiero, etcétera. Las opiniones de otras personas nos ayudan a crecer, a mejorar y evitar tantos errores. Además, cuando alguien se te acerca y te brinda su experiencia como aprendizaje, está cultivando en ti mucha raíces que te impulsarán a alcanzar todo lo que te propongas. Solo basta retirar los dedos de los oídos y escuchar esas inquietudes que probablemente estén causando algún malestares o nos mantienen estancados siempre en el mismo error. Una sugerencia no busca hacer daño, solo se centra en repararlo.

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Sí, suele ser difícil aceptar nuestros errores y defectos, y en muchas ocasiones en vez de escuchar sugerencias oímos es solo burlas y críticas negativas. A pesar de todo ello, hay que ser conscientes siempre de que como seres humanos nunca haremos todo a la perfección. Para eso está el aprendizaje, para ir conociendo poco a poco el camino a transitar mientras mejoramos cada día nuestras habilidades. Obvio nos toparemos con otras personas que han cursado el mismo sendero que tú, ¡no dudes es escuchar sus sugerencias! Ten en cuenta “la voz de la experiencia”, pues solo los que ya han viajado a las estrellas saben cómo funcionan de verdad. 😉

Como creadores de contenido para Hive, en algún momento nos encontraremos con alguien que nos dará algunos consejos para mejorar nuestra redacción y quizás la calidad de nuestros Post. Ellos nos dan sugerencias y nosotros tenemos la libertad de aceptarlas o no. ¿Qué por qué debes dejar a un lado tu ego y tomar en consideración la opinión de otros? Porque así podemos conocer en qué fallamos, cuál es nuestro punto fuerte y débil, y además, podremos identificar esos errores en los que caemos sin darnos cuenta. Únicamente necesitas abrirle la puerta a la tolerancia de ideas y aceptar las recomendaciones que sin duda te ayudarán ser una persona más comprometida.

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Son muchos los lugares donde pueden surgir las sugerencias, pero aquí traigo los más importantes:

• En el trabajo: no hay un lugar donde más se produzcan inquietudes que en el trabajo. Queda de nuestra parte sugerir cambios, reformas, y tal vez incentivar al debate para la exposición de opiniones. Suele ser difícil expresar nuestro punto de vista cuando el receptor de esa idea es quien nos paga el sueldo, sin embargo, es mejor hablar que callar, pues nuestra idea o recomendación puede resultar importante para la empresa donde laboramos. Al evocar nuestra inquietud, alentamos a la ejecución de alguna mejoría que sin duda puede beneficiarnos.

• En la familia: sí, quizás no vas a encontrar más sugerencias que las dictadas en lugar donde convivimos con todos nuestros seres queridos. A veces solemos ser rebeldes, caprichosos, obstinantes y amargados, independientemente de cuál sea la situación, le estamos haciendo un daño enorme a nuestro círculo más cercano. No bastará mucho para que nuestros padres o hermanos nos llamen la atención, nos inviten a tomar un café y nos relaten sus inquietudes. Sin duda nos aconsejarán y nos darán una sugerencia que ninguno puede dejar de escuchar y poner en práctica: “Deja esa mala actitud”. Quien oye las sugerencias de su familia nunca errará, después de todo no hay palabras más sabías que las dictadas por nuestros seres queridos con la intención de hacernos cambiar.

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• En el colegio o la universidad: siempre encontraremos o a un estudiante o a un profesor algo terco que no escuchará las opiniones ni las recomendaciones de otros. Cuando de cátedras se trata, a nadie le gusta aceptar que se ha equivocado. ¿No es mejor vivir bajo el código de la humildad? Pues sí, muchísimo mejor, y cuando oímos las sugerencias que nuestros compañeros de estudios o los estudiantes nos expresan, estamos demostrando que somos personas que aceptan las ideas y las opiniones de los demás. Algo grandioso porque además de obtener buenas calificaciones, también serás conocido como alguien que “reconoce sus errores”

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Quien sugiere aporta ideas, quien escucha mejora al mundo. La importancia de las sugerencias radica en los “cambios” positivos que podemos lograr al expresar nuestras ideas, opiniones o recomendaciones. Si tienes algo que aportar a tu círculo familiar, o en tu trabajo e incluso en tu salón de clases, ni dudes en decirlo, pues de esta manera contribuyes con alternativas nuevas para resolver algún hecho en común. ¡Alternativas! Son la virtud más hermosa de las sugerencias. ¡Procura que nunca falten en tu día a día!

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