La puerta de mis sueños. Un relato ilustrado por Raidhi Alvarado (@nestorgarcia)

Me levanté del sofá sorprendida por las luces que se desbordaban por aquella puerta semiabierta. Me estrujé los ojos y me paré frente a ella. Nunca antes había visto destellos tan bonitos y entre ellos distinguí un montón de luciérnagas que danzaban invitándome a pasar.

Llena de curiosidad, tomé con cautela el pomo de la puerta y entré. Allí adentro todo estaba iluminado, todo estaba como nuevo. Me encontré en un lugar que parecía un paraíso lleno de flores y vivos colores. Detrás de mí, la puerta permanecía abierta, si hubiera querido regresarme en ese momento hubiera podido hacerlo sin problemas. Pero no quise. Estaba dispuesta a descubrir lo que había en este hermoso lugar.

De lado a lado había más puertas, todas igualmente semiabiertas e iluminadas, en ellas estaba colgado un letrero adornado con ramitas verdes. Mi miopía no me permitía leerlos desde donde me encontraba.

Me fui acercando, en la primera puerta leí familia; caminé un poco más y en la siguiente: Sofi; luego, en la otra: los amigos de siempre.

Me detuve y emocionada miré para el otro lado, corrí a leer los otros carteles: mis amigos virtuales, decía el primero y otro más allá: la familia lejos.

No podía creer lo que estaba viendo, quería entrar por todas esas puertas al mismo tiempo. Tenía todo lo mío a un paso.

Y así, bajo un mismo cielo y en el mismo instante, me abracé a la familia como siempre, bendije a mi hija con un beso en la frente y sentí la caricia de sus suaves manos unidas a las mías. Con mis amigos de siempre, un café compartido, una buena plática y la promesa de un próximo encuentro.

Mis amigos virtuales fueron presencia y entre risas, mucho café, meriendas, música y abrazos ratificamos que la amistad no sabe de tiempo ni espacio.

Tampoco sabe de espacio ni tiempo la familia que está lejos, nos juntamos en un solo abrazo con lágrimas de felicidad y reunidos alrededor de la mesa nos echamos todos los cuentos.

A lo lejos escuché mi nombre, desperté, me había quedado dormida en el sofá. Comprendí que fue un sueño lo que hacía palpitar de felicidad mi corazón. Antes de levantarme, volví a cerrar los ojos, tratando de ver un poco más de mi sueño, pero ya no era posible.

Raidhi Alvarado (@nestorgracia)

Las fotos son de Raidhi Alavarado (nestorgarcia). Los separadores y el banner son mis diseños en Powerpoint y Canva.