Por: @flores39
10/08/2020

Esta mañana escribí y publiqué algunas fotografías sobre mi reciente viaje a la Isla Menorca; es primera vez que visito y disfruto del ecosistema mediterráneo de las Islas Baleares; vaya que manera de hacerlo, viajando desde Madríd hasta la segunda dependencia insular en cuanto a territorio y espacio geomarino se refiere.

Fue un simpático vuelo de 81 minutos; sin embargo, considero que no fue mejor que mi atrevida aventura de trasladarme a pie por un accidentado camino real desde Ferrerias hasta Cala Macarella porque mi esposo @jesusf04 y yo amamos la vegetación de galería y semi xerófila característica del litoral marino costero. Así que recorrimos algo más de 18 kilómetros porque nos falló la brújula e hicimos una mala lectura de los azimút, jajajajaja...

Cuánta alegría nos invadió cuando empezamos a sentir la brisa fuerte con su fragante salitre y arenas de la playa. La vegetación nos daba indicadores que estábamos muy cerca del litoral costero; como pudimos se abrió paso entre matorrales para hacer las fascinantes tomas fotográficas que comparto a continuación.

Ahí estaba el hermoso cuerpo natural de agua marina que fue bautizado con el nombre de Cala Macarella. Es subjetivo y muy osado de mi parte, no obstante la considero una de las calas más hermosas que he visto durante mis moderados viajes a playas del Caribe y Europa; su fresca y sana vegetación hace juego con la clorofila para ponerse de acuerdo con el Sol y dar la mágica coloración del agua; donde es posible visualizar pequeños organismos acuáticos porque es un ecosistema que goza de protección ambiental y ha sido poco intervenido.

Gracias por tu atención

📷 Fotografías tomadas con mi equipo smartphone,
marca Appel, modelo iPhone X