Solo me falta conocer tu nombre - Primera parte 📖 [ESP-ENG]

Aquella tarde salí a la calle a caminar sin rumbo. Simplemente me dediqué a andar por la vida sin muchas pretensiones, solo acompañado por mis pensamientos, esos que siempre están allí para recordarme que a pesar de las circunstancias, sigo vivo. Pienso, luego existo, decía el gran filósofo.

Este era un paseo como tantos otros, pero de pronto el tinte del paseo cambió. Se vuelve casi un mundo onírico. Sin aviso la avenida por la que suelo dar mi paseo vespertino a diario me pareció un camino de tierra, con hermosos árboles de lado y lado. Todo tipo de árboles bordeaban el camino. Robustos samanes, estilizados araguaneyes, pequeños naranjos y hasta uno que otro árbol de mango. De pronto me detengo frente a uno de esos árboles frondosos. Una caoba, me pareció y allí estabas tú. Tumbada a la sombra de aquel portentoso representante de la vida vegetal.

Sentada sobre una manta rosa, con tus sandalias perfectamente acomodadas a un lado de ésta y tus piernas cruzadas. Usabas un vestido corto con un estampado florido y un sugerente escote. Estabas concentrada en tu lectura, pero yo, pues me olvidé de todo a mi alrededor. Mis pensamientos se borraron de golpe y mis ojos se clavaron en tu abundante cabellera negra como el azabache que caía sobre tu hombro izquierdo. Tu piel blanca con un sutil bronceado destacaba un rostro fino y unos labios carnosos.

Después de unos segundos tú sentiste la presencia de mi mirada y levantaste los ojos que se escondían tras unos anteojos delgados. Mi mirada conectó inmediatamente con la tuya. Instintivamente te quitaste los anteojos y me permitiste ver unos ojos marrones que brillaban con la luz que reflejaba el sol de la tarde. Un brillo que jamás había visto. Esos ojos agregaron un nuevo trayecto a mi ya increíble paseo. Me perdí en ellos. La verdad no sé cuánto tiempo pasé allí adentro. Solo sé que de una manera poco común logré conocerte sin que articuláramos una sola palabra.

Continuará…