¿Tradición de la ruptura en la estética moderna?

La aplicación de las premisas indicadas antes (ver post anterior) al campo estético permite pensar en cómo se comenzó a instaurar desde el surgimiento y desarrollo del Romanticismo originario (el de Alemania, Inglaterra y Francia, durante la primera mitad del siglo XIX) esa tradición paradójica moderna en el arte.

_{"A una corrida de toros", por Pablo Picasso Fuente}

Desde el Romanticismo hasta bien avanzado el siglo XX esa "tradición de la ruptura" marca el decurso del arte, inaugurando los movimientos estéticos (a veces solo escuelas o tendencias) que jalonan nuestra modernidad cultural. Ocurrirá que desde entonces se producirá una dinámica crítica que se manifestará como una reacción consecutiva de una propuesta ante la imperante. Así, en reacción al Romanticismo, el Realismo; frente a este, el Parnasianismo, y luego su crítica, el Simbolismo. La mayoría de estos movimientos tienen incidencia y desarrollo en otras áreas artísticas como la pintura y la música, especialmente; incluso se producirán movimientos propios, como es el caso del Impresionismo, por citar uno de los más relevantes en la pintura (extendido a la música, para algunos estudiosos del arte).

Es curioso observar que varios de estos cambios, en muchos casos, actualizan o versionan criterios anteriores, de modo que la "negación" (supuestamente propia de la ruptura) no se cumple completamente, o incluso puede significar un retorno a ideas y prácticas pasadas. Sin embargo, la idea de lo nuevo, que pretende ser diferente y opuesto, impregnó (y quizás sigue impregnando) la cultura moderna (en la que seguimos viviendo). Una frase de Octavio Paz es central aquí:

El arte y la poesía de nuestro tiempo viven de la modernidad y mueren de ella.

Un preludio de la vanguardia artística

Una frase del crítico Antoine Compagnon parece clave para entender el fenómeno artístico que ahora presentaremos: "la religión del futuro". Desde finales del siglo XIX, ha sido impulsada por el Decandentismo, la pulsión del progreso, una idea clave en la concepción moderna. Este "progresismo" (criticado por Baudelaire) condujo a una concentración en el futuro, que se convirtió en una especie de devoción. Aunque se había reaccionado en contra de las concepciones racionalistas como el Positivismo, que concebía al progreso como "etapa" final a alcanzar, esta representación (el progreso como ideal) fue asimilada por corrientes supuestamente "revolucionarias".

La concreción de esta presunción de futuro fueron las llamadas "vanguardias artísticas" (o históricas, como le dicen ciertos estudiosos) de principios del siglo XX. Repasemos brevemente estos aspectos.

El término, frecuentemente utilizado en el siglo XX y posteriormente, se emplea para designar movimientos artísticos (más allá de los ideológicos y políticos, a los que se aplica con alguna relación). Tiene un origen militar; en francés: avant-garde(avant, antes de o delante de; garde, guardia), adaptada al español como vanguardia, que designa aquella parte o sección de un cuerpo militar que ocupa la posición delantera, que va al frente. Como bien se indica en esta fuente, es una unidad avanzada de exploración y combate, y tiene como funciones: ubicar el enemigo, explorar el terreno antes del avance del grueso del ejército, ocupar rápidamente las posiciones fuertes del campo de batalla, entre otras.

Conocer su uso en el arte es un interés particular y hay mucho material escrito sobre ello, como por ejemplo el libro de Peter Burger, Teoría de la Vanguardia (que puede ser encontrado en internet).

Lo importante aquí es indicar que habrá algunos movimientos de vanguardia en el arte desde principios del siglo XX, que marcarán su desarrollo (en la literatura, las artes plásticas, la música y el cine). Para Paz es el cierre de "la tradición de la ruptura", que es un enfoque en discusión. Sin embargo, es cierto que estas vanguardias van más allá de una visión artística, e incluyen en su visión lo político, lo psicológico, lo erótico, etc. En ese sentido, acertadamente formula Paz, que intensifican la estética del cambio impulsado por el Romanticismo.

A partir de ahora, dedicaremos algunos posts a los movimientos artísticos más relevantes, especialmente a los de incidencia literaria: Futurismo, Expresionismo, Dadaísmo y Surrealismo.

Referencias bibliográficas

Compagnon, Antoine (1999). Las cinco paradojas de la modernidad. Caracas: Edit. Monte Ávila.
Paz, Octavio (1985). Los hijos del limo. Colombia: Edit. Oveja Negra.
https://es.wikipedia.org/wiki/Vanguardia_(ej%C3%A9rcito)
https://es.wikipedia.org/wiki/Vanguardismo

_{Si estás interesado en leer los posts anteriores de esta serie, puedes visitar los siguientes enlaces:
Modernidad literaria, Romanticismo alemán , Romanticismo ingles I, Romanticismo inglés II, Romanticismo francés I y Romanticismo francés II, Realismo literario I, Realismo II, Realismo literario III, Parnasianismo I, Parnasianismo II, Edgar Allan Poe I, Edgar Allan Poe II, Edgar Allan Poe III, Walt Whitman I, Walt Whitman II, Simbolismo I, Simbolismo II, Decadentismo I, Decadentismo II, Baudelaire I, Baudelaire II, Baudelaire III, Baudelaire IV, Verlaine I, Verlaine II, Rimbaud I, Rimbaud II, Rimbaud III, Rimbaud IV, Rimbaud V, Mallarmé I, Mallarmé II, Mallarmé III, Lautréamont I, Lautréamont II, Lautréamont III, Lautréamont IV, Rubén Darío I, Rubén Darío II, Rubén Darío III, Rubén Darío IV, Modernidad y vanguardias I.}

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