Mis reflexiones antes de dormir: Refuerzo positivo

Es algo que siempre funciona, haces algo bien, eres recompensado y entonces aprendes que ese acto en particular está asociado a una consecuencia agradable y entonces, incluso inconscientemente tratarás de repetirla. Es lo que se conoce como refuerzo positivo. Lo veo como una forma de entrenamiento de la que realmente no me he documentado mucho, así que sólo estoy compartiendo lo poco que he aprendido ocasionalmente al respecto. El punto que quiero traer, es que normalmente los niños son castigados para que no repitan lo malo, cuando sería mejor que fueran premiados por las buenas conductas que queremos que ellos reafirmen.

Una vez leí, en relación a la educación escolar, que en lugar de resaltar con rojo los errores que ha cometido un niño en sus evaluaciones o tareas, debería resaltarse lo que han hecho bien, imagino que es algo que está basado en el mismo principio.

Es un principio que procuro aplicar con mis hijos, son tantas las virtudes que tienen, que trato de que estén conscientes de lo valiosos que son, lo que debe ir acompañado con lecciones de humildad para que también puedan reconocer sus errores y tratar a los demás con respeto. Como seres humanos todos tenemos nuestro valor, entonces se trata de encontrar el equilibrio entre autoestima y humildad, como como siempre dice mi madre, ningún extremo es bueno.

El entrenamiento en las clases de Karate de mi hijo es fuerte para él porque ha estado mucho tiempo en inercia en casa, muchas veces él se desanima y desea no asistir, sin embargo le enseñamos que para avanzar se requiere constancia y esfuerzo y eso aplica para todo en la vida. No podemos rendirnos cuando encontramos algún obstáculo, o cuando las cosas se ponen difíciles, o si estamos cansados, en esos momentos es cuando está a prueba nuestra voluntad y no hay mejor opción que seguir adelante, siempre he pensado que es una ley del universo que cuando no te rindes y luchas con el corazón, lo que sedeas llega a ti, incluso de la manera que menos lo esperas.

A veces un simple helado en el momento oportuno, cambia lo que podría ser una resistencia, en una experiencia agradable.

En fila para comprar un helado después de una extenuante clase de karate

Me hubiera encantado estudiar sicología, me parece tan interesante la mente humana, puede hacerse la astuta o la tonta y hacer de nosotros seres exitosos o seres frustrados, felices o infelices, proactivos o depresivos, incluso puede crear combinaciones que no parecen coherentes, como: exitosos financieramente e infelices. Además es algo tan delicado que a veces existe sólo una delgada línea entre la cordura y la locura, aunque comparto la idea de que de locos, todos tenemos un poco.

Por eso deberíamos ser más conscientes de cómo tratamos a los demás, cómo nos tratamos a nosotros mismos y más aún, cómo tratamos a los niños, cuyas mentecitas son muy frágiles y que por lo general, son muchísimas más sus virtudes que sus desaciertos, eso debería ser lo que ellos reafirmen, alimentando su autoestima y haciéndolos cada vez mejores.

El amor construye, el desamor destruye.