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The Elder Scrolls V: Skyrim es el juego que he completado en más ocasiones (entendiéndose por "completar" como terminar las misiones principales, incluidas las facciones y la guerra civil); probablemente creé alrededor de 50 avatares, de todas las razas y con todos los rasgos posibles; me he inventado retos para hacerlo más divertido: jugar como mago, guerrero, asesino sigiloso, y demás. Amo este videojuego en parte porque, aun cuando creo que ya no me queda nada nuevo por ver en las tierras del Dovahkiin aparece algo que le nunca antes hice, algo que hace sentir a Skyrim fresco, y con lo que puedo vivir nuevas experiencias relacionadas a esta joya, tal como me pasó al descubrir a los Santos y Seductores, una nueva historia (nueva para mí) que me ha enganchado, una vez más.

Está de más recalcar que nunca antes jugué el mencionado grupo de misiones. Todo empezó hace unas pocas horas (al momento de redactar estas líneas), mientras jugaba Skyrim por un rato, como hago frecuentemente, algo que conté en ¿Por qué siempre vuelvo a Skyrim?. Seguí la línea de misiones de la campaña más reciente. En eso me topé con un Khajiita de las caravanas de comercio, el cual noté que tenía unas líneas de diálogo que no recordaba con anterioridad y desbloqueó una misión al darme una nota. La intriga me invadió y continué esta línea de misiones, descubriendo que se trataba, como antes mencioné, de algo que nunca vi previamente.

Mi camino me llevó a dos campamentos de los Santo Dorados, donde en medio de intensos momentos de batalla casualmente un Dragon de Sangre atacó mientras me batía contra los Santos. Finalmente, tras acabar con todos, encontré unas pistas que me permitieron continuar con la misión. El campamento estaba rodeado de armas y armaduras nuevas, además de una curiosa criatura similar a una mantis que pude adoptar como mascota.

Me dirigí entonces a los siguientes campamentos, de los Seductores Oscuros, donde pasé por una situación similar: batalla, un par de flechazos en el pecho, y una victoria final asegurada con la ayuda de mi seguidor. Ahí otra vez me topé con armas y armaduras con un nuevo diseño, una especie de mesa de sacrificio, y otro insecto gigante, similar al anterior pero con una tonalidad opaca, que también adopté; junto a estos había más notas con información sobre cómo continuar mi misión. Estas me conducen a Soledad, la capital de Skyrim donde aparentemente un hechicero busca algo con las dos facciones que protagonizan este contenido.

Mis ansias por continuar me invaden mientras escribo este párrafo final. Hacía mucho que Skyrim no despertaba esa sensación en mí por encontrar algo nuevo, algo único. Sin embargo no pude evitar preguntarme cómo no encontré esto antes. Así que indagué un poco en foros y uno que otro portal web. Descubriendo que originalmente Santos y Seductores fue un contenido descargable del club de creación de Skyrim lanzado en el 2019. Dos años después (2021), tras la salida de la Anniversary Edition, fue liberado gratuitamente a los poseedores de la Special Edition. Una grata sorpresa que me llevó manifestar mi contento en este post mientras me tomo un descanso de lo visto. Pronto iré a Soledad con el deseo intacto de saber qué novedad me deparará ahí.