Siempre había querido estar con ella. La había deseado desde la distancia. Como un cazador que observa a su presa, su corazón se detenía solo al verla. No era ajeno a su andar, a su mirada, a la forma coqueta de peinar su cabellera y a su sonrisa amplia. Desde el mismo momento que la había visto, había sentido que el aire le faltaba. Su corazón había latido rápido, sintió que las manos le sudaban. Pero supo ocultar su deseo, lo nervioso que estaba y nadie supo nunca que era ella la mujer con la que cada noche soñaba.

Pero un día, ella descubrió la mirada de él sobre su cuerpo y aunque al comienzo se sintió un poco turbada, entendió que era pasión, deseo, lo que ella en él despertaba. Entonces, sin querer, comenzó un juego en el que poco a poco, ella se sintió acorralada, presa también de la seducción de aquel hombre que como experto cazador, esperaba. Cada encuentro, cada oportunidad, era el momento propicio para hacer una batalla: se miraban, se olían, se hablaban, se escuchaban, sintiendo que dentro de ellos crecía una hoguera en la que los dos se quemaban.

Pxfuel

Fue tanta la espera y tantas las ganas, que un día decidieron, clandestinamente, resolver todo aquello sobre una cama. Y fue el cuerpo de la mujer flor carnívora, abundante cascada y el cuerpo del hombre madera rígida, alimento abundante, hambre saciada. En plena faena, en un espejo, vio el hombre la imagen de ellos reflejada: los cuerpos desnudos, sudorosos, y los zapatos rojos de la mujer, sobre sus hombros, a cada lado de su cara. En ese instante pensó que por el resto de su vida, aquella imagen en su mente quedaría grabada.

Por eso, las veces que la ha vuelto a ver, le ha ofrecido un saludo fingido. Ella lo saluda también lejana y esquiva, como si lo de ellos jamás hubiese existido. Entonces él mira sus zapatos rojos y no puede creer lo cruel que puede ser el destino. Él muriendo por aquella mujer y ella es la esposa de su mejor amigo.

Shoes on the shoulder

He had always wanted to be with her. He had longed for her from afar. Like a hunter watching his prey, his heart stopped only at the sight of her. He was no stranger to her walk, her gaze, the flirtatious way she combed her hair and her broad smile. From the very moment he had seen her, he had felt short of breath. His heart had been beating fast, he felt his hands sweating. But he knew how to hide his desire, how nervous he was, and no one ever knew that she was the woman he dreamed of every night.

But one day, she discovered his gaze on her body and although at first she felt a little disturbed, she understood that it was passion, desire, what she awakened in him. Then, unintentionally, a game began in which, little by little, she felt cornered, also prey to the seduction of that man who, like an expert hunter, was waiting. Every encounter, every opportunity, was the right moment to do battle: they looked at each other, smelled each other, talked to each other, listened to each other, feeling that inside them a fire was growing in which they were both burning.

Pxfuel

It was so much waiting and so much desire, that one day they decided, clandestinely, to solve all that on a bed. And the woman's body was a carnivorous flower, abundant waterfall, and the man's body was rigid wood, abundant food, satiated hunger. In the middle of the work, in a mirror, the man saw their image reflected: their naked, sweaty bodies, and the woman's red shoes on her shoulders, on either side of her face. At that moment he thought that for the rest of his life, that image would remain engraved in his mind.

That is why, every time he has seen her again, he has offered her a feigned greeting. She greets him also distant and elusive, as if their relationship had never existed. Then he looks at her red shoes and cannot believe how cruel destiny can be. He is dying for that woman and she is the wife of his best friend.

*Texto original creado por @nancybriti y traducido con Deepl Translate

HASTA UNA PRÓXIMA HISTORIA, AMIGOS