Hoy me encontraba revisando mi galería de fotos a ver qué podía compartir con ustedes, y viendo las fotos que he tomado en los últimos meses me puse a reflexionar más de la cuenta en todo lo que me he atrevido hacer en tan poco tiempo, y todo una vez que vencí el miedo y me atreví hacer las cosas que jamás hubiese pensado que podía hacer.

Toda mi vida he Sido una persona un poco insegura y que duda de si misma, me dan miedo muchas cosas en especial la incertidumbre. El no saber que esperar de una persona o una situación en concreto me desespera, me genera ansiedad. Sin embargo, el 2022 inicio de la manera más alocada que se puedan imaginar, totalmente a la deriva, sin saber que esperar, algo que por mi ho no estaba bajo mi control, y una vez perdí ese miedo, no saben todo lo que he alcanzado y estoy por alcanzar.

He visto muchos cambios en mi, antes las interacciones sociales me costaban un poco, ahora me desenvuelvo de una manera mucho más natural y me siento cómoda con ello. Algo que me causa gracia es mi miedo al mar, a los peñeros, hace unos meses cuando llegue a Chuao que agarre esa lancha con ese mar agitado sentía un montón de miedo, hoy tiempo después, hasta traslados nocturnos he realizado a través de ese Mar tan imponente, y aunque no les voy a mentir y decir que no siento miedo, si tengo más autocontrol de mis emociones y me siento mucho más confiada.

El miedo es un mecanismo de defensa que desarrollamos para protegernos de situaciones de peligro, para poder sobrevivir. Sin embargo, a veces nos enfrascamos tanto en el, que nos limitamos a realizar muchas cosas por miedo al que dirán, a si las cosas salen mal, a fallar, a defraudar, en fin, tantas cosas. Pero les digo, de vez en cuando salir de esa zona de confort, es vital para poder avanzar en la vida.