Saludos cordiales amigos lectores de Hive gusto escribir unas líneas en este día. Muchos han escrito en la comunidad de @holos-lotus sobre la felicidad en base a la iniciativa de @damarysvibra en cuanto a "la felicidad en perspectiva"; por lo que, también a través de este contenido quiero aportar un poco. En el paso del tiempo de nuestras vidas, en ese desarrollo humano tanto físico como en la madurez interior, vamos en esa búsqueda de la felicidad y a medida que pasa el tempo nos encontramos con factores, situaciones y circunstancias que nos hace preguntarnos ¿Soy realmente feliz? o ¿Cómo puedo ser feliz? porque parece ser que se torna en ocasiones como tan difícil y lejana la felicidad.

La verdadera alegría y felicidad son valiosas para cada uno como humanidad, y es que pese a todo lo que nos toque enfrentar y vivir, debemos esforzarnos y ser valientes de lo contrario no podremos lograr estas dos antes mencionadas "alegría y felicidad". Toda persona o grupo independientemente de la cultura, edad, sexo, estatura... trata obtener de la vida tanto placer como le sea posible; es decir, sumar sensaciones de gozo o satisfacción en la vida de aquello que le agrada y da resultado, buscando de alguna u otra manera estar tan libre de lo que altere esta como se pueda en nuestro existir, cuanto nos sea posible; no obstante, es inevitable no pasar por el dolor y experimentarlo, ya que nuestra propia sobrevivencia puede verse amenazada por nuestras malas decisiones como por malas acciones de quienes estén en el entorno que nos rodea. Todo esto me lleva a pensar y reflexionar mucho en cada etapa de vida que me ha tocado experimentar y saborear donde cada uno podemos llevar una vida más feliz, mejorando las posibilidades, buscando herramientas y estrategias que nos permitan serlo, poder degustar esa condición o estado de bienestar, satisfacción, lo placentero y pleno.

Para empezar debemos ser agradecidos por contar con vida, cada amanecer es una nueva oportunidad. Más allá de ver lo malo, las carencias, quejarnos, amargarnos y tantas otras cosas; comencemos a buscarle el lado bueno a cada situación, es como medicina ante el desaliento. Y sé muy bien que en ocasiones cuesta por las circunstancias que estemos atravesando, no escribo por escribir sin experiencia, he tenido muy fuertes momentos y aun no me es fácil, se presentan situaciones algo apretadas por así decirlo; las cuales son temporales; pero cambiar de enfoque y ver lo bueno, la enseñanza y aprendizaje a esos momentos es la mejor opción. En cuento a la felicidad en perspectiva, pienso que la vida esta llena de puertas... Debemos proponernos cerrar con la puerta del olvido, toda abertura o comunicación con el pasado triste, con esos ayeres muertos; es un mal que nos roba todo rastro de felicidad vivir recordando continua y frecuentemente esos pasados de tristeza; por allí llegue a leer en medio de tantos libros de lectura que me han nutrido lo siguiente: "Agua pasada no mueve el molino", ¡Cuanta verdad en ello! Ya lo pasado...pasado, que ganamos con tanto recordar, llorar o añorar, es cuestión de superar lo que se vivió tiempo atrás y avanzar en el presente. Estar hundido en ello es despilfarrar energía, desgaste a nivel emocional y mental, olvidándonos de la felicidad en el ahora.

La felicidad se encuentra en la actitud con que te decidas en asumir la vida; tú solo tú, ves si te afectan los fuertes golpes y vendavales que puedan levantarse y venir a tu existencia, tú decides si derrumbarte o seguir con mayores fuerzas. En cada uno pesa la responsabilidad de adónde quieres que te lleve el camino que conduces, puesto que en nosotros está la decisión de establecer metas para la vida, una relación, emprendimiento o en cada etapa del vivir. La vida es tan incierta mi estimado lector que la felicidad debe aprovecharse en el momento en que se presenta y ser creadores de ella pese a lo mucho o poco que se pueda tener.

La felicidad genera una gran satisfacción interior aprendiendo a vivir contento, nos permite ver nuestro valor interno, no en fuentes externas como lo material, la fama, la apariencia o en otros, sino en estar bien y plenos con nosotros mismos. Humanamente tendemos a reducir la felicidad al bienestar afectivo en la dependencia de amor, cariño o afecto que otra persona te brinde, esta va más allá... conlleva una "acción". Por ello, día a día debemos decidir ser felices y no ser como aquellos que deciden quedarse de brazos cruzados y no hacer nada para serlo. Algo que he entendido en base a cada proceso que me ha tocado experimentar en mis vivencias, parte en lo siguiente, que para poder hoy por hoy escribir sobre estas líneas y ser feliz en medio del caminar es haber tenido la capacidad de liberarme del miedo y del sufrimiento, soltando esto mis manos estuvieron el espacio suficiente y necesario para recibir paz, alegría, fe, esperanza y gozo que tanto necesitaba y no tenía; pero que hoy puedo compartir con aquellos que están a mi lado y ocupan un lugar especial en mi corazón.