Entre la vida... mis sueños.

Yo siempre tengo unos sueños
tan hermosos y bonitos,
que me provoca es estar
eternamente dormido.

Sueño estar en una playa
comiendo sabroso hervido
de jurel, bagre o de pargo
en buen envase servido.

Igual me llega en las noches
la imagen en un castillo
donde soy el propio rey
con su reina de amarillo.

Llego a tener hasta un yate
navegando en mares vivos
y yo mismo lo conduzco
para evitar los peligros.

Soy propietario de un hato
en el Apure florido
donde como las cachapas
con queso y cochino frito.

En mis sueños siempre viajo
por los más variados sitios
como Abu Dhabi o Madrid
donde gozo de lo lindo.

Esos sueños me acontecen
y resultan ser muy finos
porque hasta del mundo a veces
yo soy el hombre más rico.

Me ligo con personajes
famosos y esclarecidos
quienes piden mi opinión
porque soy un erudito.

En las noches nadie hay más
feliz que yo pues transito
con las mil comodidades
por mis amplios edificios.

Solamente Sancho Panza
supera como yo vivo,
pues llegarle a Barataria,
ese sí que es inaudito.

Hago mis obras sociales
y a mi prójimo subsidio
pues no permito que nadie
sufra por hambre o por frío.

A mis sueños los adoro
y aunque en casita resido,
solo espero que la noche
se aproxime a mi recinto.

También hago muy felices
a mis queridos vecinos
con los que comparto a diario
hasta en tiempos decembrinos.

Soy dichoso y cada noche
anhelo soñar bonito,
y cuando a mí me despiertan
por nada me desanimo.

Yo siempre tengo unos sueños
tan hermosos y bonitos,
que me provoca es estar
eternamente dormido.