A media noche

El trabajo: estrés del día a día, las ganas:, cosa que a veces me falta, y el cansancio:, con el que tengo que lidiar todos los días.

Cómo me cuesta irme a dormir por las noches, a pesar de todo el cansancio y el trajín del día, de lo agotado que estaba, y aun así sin poder pegar un ojo en toda la noche, cosa que es muy rara. A altas horas de la noche deambulo por los pasillos de mi casa, sin sueño alguno.

Hasta llegar a el balcón donde no se veía ni una sola alma en la calle, con un cigarrillo en la mano y afincando mi cuerpo sobre las rejas del balcón, mientras que las luces de los postes brillaba sobre mi cara y la luz de la luna tenía su ojo puesto encima mío.

Es así que la brisa comienza a ser congelada a medida de que van pasando las horas, eran las 3:00 de la mañana y aun no me daba sueño, solamente pensando en cosas que han pasado y en cosas que me gustaría que pasaran, pero las cuales no estoy tan seguro que sucedan.

Metiéndome a la casa y hiendo directo a la ducha a darme un baño a pesar del frío que estaba haciendo, mientras que cientos de pensamientos confusos llegaban a mi cabeza sin ningún sentido, quizás es ese el dolor de cabeza que me tiene despierto tan tarde, tan solo quisiera dormir, y no pensar tanto.

Al acostarme en la cama sigo recordando momentos muy especiales para mí, momentos que provocan que salgan lágrimas de mis ojos, quedándome dormido mientras que las gotas de mis ojos tocaban las sábanas, y sabiendo que aquellos momentos felices jamás volverán.