Aquella noche gélida me encontraba observando las estrellas de un cielo completamente despejado, y con los binoculares observaba las estrellas del cinturón de la constelación de Orión. Había algo un resplandor distinto en una de sus estrellas que me llamaba especialmente la atención. Sentía que había algo allí, que interactuaba conmigo, al mismo tiempo tenía una sensación de ser observado, ¿pero desde tan lejos? No parecía tener sentido, eran las 10 de la noche y mis parpados me pesaban, pronto me quedé dormido en la intemperie.

Esa noche tuve un sueño muy extraño, allí mismo una luz blanca cegadora se posaba sobre mí, y me transportaba al pasado antes de cualquier civilización humana, había viajado millones de años atrás, y me encontraba en tiempos prehistóricos. Un ser humanoide reptiliano de color verde se presentaba ante mí, y me explicaba que al centrar mi atención en la constelación de Orión, había logrado conectar con su civilización, que hace vida en un planeta que orbita la estrella Mintaka. Extrañamente no sentía miedo, me sentía en paz y armonía con este ser, que se comunicaba telepáticamente, no profería palabra alguna, hablaba a través de mis pensamientos.

Fuente

Este ser me mostró el planeta tierra en el periodo del triásico, periodo en el cual según los libros de paleontología aparecieron los primeros dinosaurios. Y me dijo, el planeta que habitas fue una vez nuestro, los reptiles que ves a tu alrededor, además de formar parte de la fauna y todo un ecosistema también eran nuestro alimento, algo así como lo que ustedes conocen como ganado y aves de corral. Su planeta es maravilloso, lo habitamos durante millones de años, pero al final del periodo cretácico, una guerra nuclear entre nuestra especie se desato, arrasando con todo el planeta. Los pocos sobrevivientes nos vimos obligados a abandonar este planeta, y nuestro destino habitable más cercano eran una planeta llamado Arelax, ubicado en la constelación de orión.

Allí nuestra especie empezó a construir la civilización desde cero, y no perdimos de vista nuestro antiguo planeta, en donde la vida surgió nuevamente a partir de los pequeños seres que sobrevivieron a la hecatombe. Lamentablemente tu especie parece estar siguiendo el mismo camino que la nuestra, y temo que en algún momento vuelva a ocurrir un exterminio masivo. Eres la única persona que ha podido conectar con nuestra consciencia y por lo tanto es a ti a quien transmito el mensaje, aun cuando nada puedas hacer.

En ese momento me desperté y eran las 9 de la noche del día siguiente, no tenía sentido, ¿es que acaso había dormido durante 24 horas? Tampoco sentía hambre, ni estaba resfriado al haber pasado tanto tiempo en el gélido exterior. Ha sido un acontecimiento explicable, que solamente puedo compartir como un relato fantástico.

Muchas gracias por su atención, invito a participar a @mairene1

That frigid night I was stargazing in a completely clear sky, and with binoculars I was observing the stars of the belt of the constellation Orion. There was a distinct glow in one of the stars that caught my attention. I felt there was something there, interacting with me, at the same time I had a sense of being observed, but from so far away? It didn't seem to make sense, it was 10 o'clock at night and my eyelids were weighing me down, soon I fell asleep in the open.

That night I had a very strange dream, right there a blinding white light rested on me, and transported me to the past before any human civilization, I had traveled millions of years ago, and I was in prehistoric times. A green reptilian humanoid being appeared before me, and explained that by focusing my attention on the Orion constellation, i had managed to connect with his civilization, which lives on a planet orbiting the star Mintaka. Strangely I felt no fear, I felt in peace and harmony with this being, who was communicating telepathically, not uttering any words, speaking through my thoughts.

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This being showed me the planet earth in the Triassic period, the period in which according to paleontology books the first dinosaurs appeared. And he told me, the planet you inhabit was once ours, the reptiles you see around you, besides being part of the fauna and a whole ecosystem were also our food, something like what you know as cattle and poultry. Your planet is wonderful, we inhabited it for millions of years, but at the end of the Cretaceous period, a nuclear war between our species broke out, wiping out the entire planet. The few survivors were forced to leave this planet, and our nearest habitable destination was a planet called Arelax, located in the constellation Orion.

There our species began to build civilization from scratch, and we did not lose sight of our old planet, where life arose again from the small beings that survived the hecatomb. Unfortunately your species seems to be following the same path as ours, and I fear that at some point a mass extermination will happen again. You are the only person who has been able to connect with our consciousness and therefore it is to you that I pass on the message, even if there is nothing you can do.

At that moment I woke up and it was 9 o'clock at night the next day, it made no sense, had I slept for 24 hours? I didn't feel hungry either, nor did I have a cold, having spent so much time in the freezing cold outside. It was an explainable event, which I can only share as a fantastic story.

Thank you very much for your attention, I invite @mairene1 to participate.

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