El castillo de Montalbán

Después del castillo de la Orden de Calatrava, que protegía el acceso central hacia los Montes de Toledo, y el de la Orden del Hospital, que protegía el flanco oriental, le toca el turno ahora a un castillo de la Orden del Temple: el castillo de Montalbán, que guardaba el paso del oeste de los montes.
Cedido a los templarios por Alfonso VII, el Emperador, a mediados del siglo XII, su misión era guardar los pasos de la zona del oeste de los montes. Es un castillo imponente, rodeado por una de las murallas más impresionantes que he visto; salvo por uno de sus lados, que tiene la protección natural de del cañón del río Torcón, un barranco cortado a pico, que tan solo requería de un sencillo muro.