Claro de luna | Microrrelato [Spa/Eng]🥇

Después de tanta insistencia accedí a acompañar a mis amigos a pasar el fin de semana en su cabaña en las montañas.

A esta pareja de amigos los había conocido en una conferencia de mitología y luego continuamos encontrándonos en cuanto foro o actividad relacionada con la Ufología hubiera, temas que nos eran comunes y que nos apasionaban.

Se autonombraban Fobos y Deimos, en franca alusión a las lunas de Marte o por el miedo y el terror con lo que bromeaban todo el tiempo, burlándose de sí mismos por la extraña enfermedad que deformaba sus cuerpos, haciéndolos ver extremadamente blancos, delgados, encorvados y con malformaciones óseas que les producían fuertes dolores.

A pesar de su desagradable aspecto y su humor negro, nos habíamos hecho buenos amigos; quizá porque en el fondo yo también era un tanto macabro en mi forma de ser y en mis gustos.

Éramos afines y sin embargo, había un “algo” que me impedía aceptar sus invitaciones para compartir a solas lejos del ajetreo de la ciudad. Pero, ese día había dicho que sí, tal vez influenciado por la emoción del ofrecimiento donde presuntamente veríamos señales celestes provenientes del espacio.

Había sido un día perfecto, con un cielo despejado y una suave brisa refrescante. La cabaña era modesta pero impactante echa de piedras ensambladas unas con otras, y su interior estaba decorado con pinturas y artefactos relacionados con los ovnis y extraterrestres. Todo era fascinante.

Tomamos un extraño té amargo, que disfrutábamos a sorbos cortos, acompañados de unas galletitas en forma de platillos voladores, mientras que Fobos nos indicaba el protocolo para hacer contacto con los alienígenas en esa noche de luna llena.

Al caer la noche caminamos por el bosque hasta encontrar un lugar despejado; ahí tendimos nuestros mats, y bajo la dirección de Deimos realizamos ejercicios de respiración y unas posturas de yoga que jamás había practicado. Nos tendimos en el suelo en un profundo estado de relajación.

No sé si por la energía reinante o por el efecto de ese extraño té amargo, pero me pareció ver a la luna acercarse hasta tomar un tamaño mucho mayor de lo que jamás la había visto, y entré en un estado de pesadez e inmovilidad mientras un zumbido se apoderaba de mis oídos.

Mis ojos entreabiertos podían observar todo lo que sucedía a mi alrededor. Fobos y Deimos se incorporaron con dificultad de sus mats y caminaron hacia el claro de luna y, mientras una incandescente luz los envolvía, sus deformados cuerpos comenzaron a desprender partículas hasta convertirse en seres de luz y ascendieron lentamente hacia la enorme luna.

Desperté atontado y aturdido; ya era de día. Seguía en el bosque y aún se podía apreciar la luna en el otro extremo. No había rastro de mis amigos, tan solo sus mats en señal de que no había sido un sueño.

Ceo que esa fue su manera de despedirse y convertirme en fiel vocero de que, en este mundo, los humanos no estamos solos.

LA FOGATA: Concurso de literatura creativa. Edición # 3

La idea es que nos inspiremos en una imagen [foto creada por @gornat con AI] para hacer un relato corto de entre 200 y 500 palabras, en idioma español o bilingüe, pero uno de los idiomas debe ser español.

Se podrá concursar en los géneros literarios Misterio/Policíaco, Fantasía/Ciencia Ficción y Terror con solo un relato por cada autor.

After so much insistence I agreed to accompany my friends to spend the weekend at their cabin in the mountains.

I had met this pair of friends at a mythology conference and then we continued to meet whenever there was a forum or activity related to ufology, topics that were common to us and that we were passionate about.

They self-named Fobos and Deimos, in frank reference to the moons of Mars or to the fear and terror with which they joked all the time, making fun of themselves for the strange disease that deform their bodies, making them look extremely white, thin, bent and with bone malformations that caused them severe pain.

Despite their unpleasant appearance and their black humor, we had become good friends; perhaps because I was also somewhat macabre in my way of being and in my tastes.

We were kindred and yet there was a "something" that prevented me from accepting their invitations to share alone away from the hustle and bustle of the city. But that day I had said yes, perhaps influenced by the emotion of the offer where we would supposedly see celestial signs coming from space.

It had been a perfect day, with a clear sky and a soft refreshing breeze. The cabin was modest but striking, made of stones assembled with each other, and its interior was decorated with paintings and artifacts related to UFOs and extraterrestrials. Everything was fascinating.

We took a strange bitter tea, which we enjoyed in short sips, accompanied by biscuits in the shape of flying saucers, while Fobos told us the protocol to make contact with aliens that night of the full moon.

When night fell we walked through the forest until we found a clear place; There we spread our mats, and under the direction of Deimos we performed breathing exercises and some yoga positions that I had never practiced. We lay on the ground in a deep state of relaxation.

I don't know if it was the reigning energy or the effect of that strange bitter tea, but it seemed to me that I saw the moon approach until it took a much larger size than I had ever seen it, and I entered a state of heaviness and immobility while a buzzing took over my ears.

My half-open eyes could observe everything that was happening around me. Fobos and Deimos rose with difficulty from their mats and walked towards the moonlit clearing and, while an incandescent light enveloped their deformed bodies, they began to release particles until they became beings of light and ascended slowly towards the huge moon.

I woke up dazed and confused; It was already daytime. I was still in the forest and you could still see the moon at the other end. There was no trace of my friends, just their mats as a sign that it was not a dream.

I know that this was their way of saying goodbye and making me a faithful spokesperson for the fact that, in this world, humans are not alone.

LA FOGATA: Creative Literature Contest. Edition # 3

The idea is to be inspired by an image to make a short story of between 200 and 500 words, in Spanish or bilingual, but one of the languages must be Spanish.

The literary genres Mystery/Police, Fantasy/Science Fiction and Horror may be entered with only one story per author.