Cambiando factores de vida e ir desarrollando entorno factibles

Muchas cosas queremos cambiar, pero un hecho muy notable es la distancia que hay desde nuestras palabras a los hechos concretos, soy muy positivo cuando en ocasiones me motivo y hago planes para hacer tantas cosas, sin embargo todo lo contrario es lo que pase en realidad, lo que me ha llevado a descubrir el secreto a romper entre lo digo y lo que en realidad terminó haciendo.

El plan que he venido aplicando y que me ha dado resultado es algo que llamó positivismo a la inversa, y consiste en hacer primero y planear después, pues en base a diversas necesidades lo que hago es conseguir soluciones que van poco a poco abriendo nuevos senderos con puertas abiertas y soluciones que deben planificarse para aperturar nuevos retos.

Dichos retos lógicamente van a traer nuevos problemas, a los cuales no planificó sus soluciones ni realizo planteamientos de positivismo, sino que simplemente actuó en base a las nuevas necesidades, y así sucesivamente se va cumpliendo un ciclo el cual se puede romper según sea la meta final de nuestros objetivos.

El poder entrar en un escenario positivista nos motiva, nos da un impulso, pero también nos da confianza de peligrosamente todo quede en un exceso de positivismo, lo ideal para mi vida es lo que he encontrado y realmente me ha funcionado, por lo que creo que no existe una receta mágica de desarrollo personal para todos, sino más bien un modo de prueba y cambios que junto con nuevas adaptaciones haran que nuestra vida vaya escalando peldaños y seamos triunfadores bajo nuestro propio lema de vida.