Thanks my dear Nidia (En/ Es)

Going through my family albums, I came across this photo and so many memories, feelings and emotions that I had that day came to me; but let's start at the beginning. When I had my first daughter, my routines changed in terms of outings, routines, but in terms of friendships, they remained more or less the same, our sharing, visits, were no longer so often, but we continued to visit each other, perhaps because all my friends at that time, were also having their children, so we shared this new stage, As far as possible, we hardly ever met to go out alone, only on a few special occasions when it was without children, but generally our meetings included our children almost always, so I didn't feel that part so much, on the contrary, I felt integrated to the world of moms, we continued to have common themes and that was very nice.

But then my daughter grew up, many circumstances changed, and for those days, as she was already older, it was easier for me to have more time for myself, I could share a little more with my friends as "contemporary adults" as we used to say without children, because we could delegate the care of our children to our husbands, grandparents or trusted friends, to be able to go out alone for a few hours. It was like going back to my personal life, there were more events for adults as our children grew up, it was already another level, when it was time to share with our children we did it, but there came a time when they preferred to do other activities than hanging out with us, my daughter was already entering adolescence, in my case, so we already had other routines. In the meantime, I divorced my husband, her father, and we were alone for a while, then there were more changes, it was just her and me.

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Time passed, I met my current husband and we decided to have our first daughter together. There my world was turned upside down, because in spite of wanting to be a mother again, my adopted routines changed a 100 giving a huge turn; it was like being a first timer, in spite of already having a daughter, many things had changed even the designs of the diapers ha, ha, ha, ha and I had no idea how to adapt again. Besides that my circle of friends remained, but I could not interact as much as before, because I had a little girl and it was difficult for me to attend their meetings or events, because all of them were without small children, then many told me, but come with the baby, but I knew that I would feel uncomfortable and that my baby, who by then (my girl now 15) could feel uncomfortable or something could affect her, the weather, the noise, all that I thought before; plus everything that involves going out with a small child, diapers, bottles, clothes, in short, just thinking about it made me tired ha, ha, ha, ha.

In this photo, I resume the story, it was my first outing to a birthday of a very dear friend, who also insisted me so much for us to go, that despite all that involved going out with such a small baby, there would be two months my girl, we decided to attend a moment, she was the only baby of the place and as it was on a terrace and there was comfort for the car and everything else I went. At the time of the photo, I was already tired and my husband was holding the baby. We lasted a short time so as not to disturb the routine of the child, but although I was happy to be able to attend, it became more palpable that my life no longer revolved around me, but around that little pink button and my other older daughter. It was a difficult few months adjusting to my new reality. Some of my friends supported me and tried to be there when I needed some fresh air, to talk, to laugh; but there were also others who moved away, because I could no longer be there as before in their meetings, even family members. Since the invitations stopped being so often, because "sure she won't be able to", I imagine, it was easier to assume, to justify, the fact of not wanting to have a baby around. That happens.

It sounds harsh, but this is also part of motherhood. So my advice to you is, stick with those who are there for you and yours at all times, learn to see faces and know who to be with and who not to be with. Let's support the new mothers in their process, because many times they need that respite, where they can be part of a coffee, a celebration, even a meal, even if we have small children. No doubt they will make a difference in that new mom. I thank my friend for her insistence that day, because she encouraged me to get dressed up, to leave the house for a moment and made me feel included, that was the best feeling. Thank you, my dear Nidia, ♥️, greetings my friends!

My friend Nidia

Revisando mis álbumes familiares, me topé con esta foto y vinieron a mí tantos recuerdos, sentimientos y emociones que tuve ese día; pero vamos a empezar por el principio. Cuando tuve a mi primera hija, mis rutinas cambiaron en cuanto a las salidas, rutinas, pero en cuanto a las amistades, se mantuvieron más o menos, nuestros compartir, visitas, ya no eran tan a menudo, pero si nos seguimos visitando, quizás porque todas mis amigas en ese tiempo, estaban también teniendo a sus hijos, entonces compartíamos esta nueva etapa, en la medida de lo posible, ya casi no nos reuníamos para salir solas, solo en contadas ocasiones especiales en donde era sin niños, pero generalmente nuestros encuentros incluían a nuestros hijos casi siempre, entonces como que no me pego tanto esa parte, al contrario, me sentía integrada al mundo de mamás, seguíamos teniendo temas en común y eso era muy agradable.

Pero luego mi hija creció, muchas circunstancias cambiaron, ya para esos días, como ya estaba más grande, me era más sencillo, poder tener más tiempo para mí, ya podía compartir un poco más con mis amigas como "adultas contemporáneas" como decíamos nosotras sin niños, pues podíamos delegar el cuidado de nuestros niños a nuestros esposos, abuelos o amistad de confianza, para poder salir solas, por unas horas. Era como retomar de nuevo mi vida personal, había más eventos para adultos a medida que nuestros hijos crecían, ya era otro nivel, cuando tocaba compartir con nuestros hijos lo hacíamos, pero llego un momento en que estos preferían realizar otras actividades a andar con nosotras, ya mi hija estaba entrando a la adolescencia, en mi caso, entonces ya teníamos otras rutinas. En ese interin, me divorcié de mi esposo, su padre y quedamos solas por un tiempo, entonces ya había más cambios, solo éramos ella y yo.

Pasó el tiempo, conozco a mi actual esposo y decidimos tener a nuestra primera hija en común. Allí mi mundo se trastocó, pues a pesar de querer ser madre de nuevo, mis rutinas adoptadas cambiaron a un 100 dando un giro enorme; era como ser una primeriza, a pesar de tener ya una hija, muchas cosas habían cambiado hasta los diseños de los pañales ja, ja, ja y yo no tenía idea de como volverme a adaptar de nuevo. Aparte de que ya mi círculo de amistades se mantenía, pero ya yo no podía interactuar tanto como antes, porque tenía una nena pequeña y se me hacía difícil, poder asistir a sus reuniones o eventos, porque todas ellas, eran sin niños pequeños, entonces muchos me decían, pero ven con la bebé, pero yo igual sabia, que me iba a sentir incómoda y que mi bebé, que para ese entonces (mi niña ahora de 15) se podía sentir incómoda o algo la podía afectar, el clima, el bullicio, todo eso lo pensaba antes; además de todo lo que implica salir con un niño pequeño, pañales, teteros, ropa en fin, nada más de pensarlo me cansaba ja, ja, ja.

En esta foto, retomo la historia, era mi primera salida a un cumpleaños de una amiga muy querida, que aparte me insistió tanto para que fuéramos, que a pesar de todo lo que implicaba salir con un bebé tan pequeño, allí tendría dos meses mi niña, decidimos asistir un momento, era la única beba del lugar y como fue en una terraza y había comodidad para el coche y todo lo demás fui. En el momento de la foto, ya yo estaba cansada y mi esposo sostenía a la niña. Duramos poco tiempo para no alterarle la rutina a la niña, pero aunque estaba contenta de poder asistir, se hizo más palpable que mi vida ya no giraba en torno a mí, sino en torno de ese botoncito de rosa y mi otra hija mayor. Fueron meses difíciles para adaptarme a mi nueva realidad. Algunas de mis amistades me apoyaron y trataron de estar allí, para cuando necesitaba un poco de aire fresco, de conversar, de reír; pero también hubo otros que se alejaron, porque ya no podía estar como antes en sus reuniones, incluso hubo familiares. Ya que las invitaciones dejaron de ser tan seguidas, porque "seguro no va a poder", imagino, era más fácil suponer, para justificar, el hecho de no querer tener un bebé cerca. Eso sucede.

Suena duro, pero esto también forma parte de la maternidad. Así es que el consejo que les doy es, quédense con aquellos que en todo momento están para ti y los tuyos, aprendan a ver rostros y saber con quién sí y con quién no. Apoyemos a las nuevas madres en su proceso, porque muchas veces necesitan de ese respiro, donde las hagan partícipe de un café, de un festejo, hasta de una comida, así tengamos niños pequeños. Sin duda harán la diferencia en esa nueva mamá. Yo agradezco a mi amiga por su insistencia ese día, porque me impulso a arreglarme, a salir por un momento de casa y me hizo sentir incluida, ese fue el mejor sentimiento. Gracias, mi querida Nidia, ♥️, saludos mis amigos!